_
_
_
_
_

Tarín edita 'Jazzin reggae' tras figurar en un álbum con Clapton y Santana

El guitarrista valenciano Alberto Tarín presentó ayer en la Sociedad de Autores (SGAE) Jazzin' reggae, un álbum en el que, como el título indica, ha propiciado un encuentro entre ambos géneros. Para ello ha contado con la ayuda de un elenco de músicos de jazz encabezados por Perico Sambeat, Ricardo Belda, Lucho Aguilar y Francisco Blanco Latino, además de viejos compañeros de fatigas como Rafa Villalba y Jesús Gabaldón. Estos dos últimos ('con ellos me voy al fin del mundo', subraya Tarín) trabajaron codo con codo con el guitarrista, sobre los escenarios y en el estudio de grabación, en una de las etapas más luminosas de Seguridad Social, la que va del álbum Que no se extinga la llama (el de Chiquilla) a En la boca del volcán. En la presentación estaba también el coproductor del álbum, Sergio Monleón, con el que trabajó especialmente en el seno del grupo Jah Macetas, todo un emblema del reggae valenciano. El proceso de elaboración de Jazzin' reggae ha durado dos años y ha sido, 'sobre todo', explica su autor, 'un trabajo de investigación, escuchando muchos clásicos del jazz y buscando puntos de encuentro con el reggae, especialmente con sus líneas de bajo'. Con la ayuda de Monleón, Tarín se ha acercado también a algunos músicos y productores jamaicanos que coquetearon con el jazz. El resultado es una colección de canciones donde la mitad proceden del jazz (piezas de Gershwin, Mancini y Porter, entre otros) y el resto tienen denominaciones de origen dispares: desde el Imagine de John Lennon al Slave driver de Bob Marley.

Para Tarín, todavía está fresca la publicación del álbum recopilatorio Guitar music for smalls rooms 2 (2001) en el que su tema Bolero de luna se codea con piezas interpretadas por guitarristas legendarios como Eric Clapton, Jeff Beck o Carlos Santana. Esa canción, que ha figurado antes en otros discos colectivos internacionales, es parte del primer álbum en solitario de Alberto Tarín, titulado Coraje (1998) y que, tras pasar casi inadvertido en España, curiosamente permaneció durante varias semanas en las listas de éxito canadienses.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_