El Bloc inicia una larga campaña para llegar a las Cortes y 'romper las mayorías absolutas'

La clausura ayer del II Congreso Nacional del Bloc Nacionalista Valencià fue el primer acto público de la larga campaña que han diseñado los nacionalistas valencianos con el objetivo declarado de superar la barrera del 5% de los votos en las próximas elecciones autonómicas, acceder a las Cortes Valencianas y, en palabras del renovado presidente Pere Mayor, 'romper las mayorías absolutas'. Un 80% de los delegados al congreso renovaron su confianza en Mayor como presidente y cerca del 90% apoyaron la nueva ejecutiva que dirige Ferran Puchades.

El guión se cumplió a la perfección. Los nacionalistas vivieron un intenso debate previo al congreso en el que no faltaron enmiendas a la totalidad y propuestas alternativas a las ponencias política y de estatutos presentadas por la dirección, aunque sólo llegó viva al congreso la iniciativa sobre la organización interna del partido.

El sábado, algunos sectores, supuestamente desplazados por la ejecutiva saliente, expresaron su descontento con un ligero voto de castigo hacia el secretario general, Ferran Puchades.

Pero 24 horas después, los nacionalistas aprobaban todas las ponencias por práctica unanimidad; aclamaban la nueva ejecutiva ampliada diseñada por Puchades, que recibió el refrendo de cerca del 90% de los delegados; y mantenían su confianza en Mayor, quien mantiene la presidencia del Bloc con un respaldo ligeramente superior al 80%.

Enric Morera, presidente del congreso, comentó que 'el largo viaje a Itaca' que inició el Bloc hace dos años en su congreso fundacional sigue su curso 'con las bodegas llenas de nuevas propuestas políticas y una nueva tripulación' integradora.

Tanto Mayor como Puchades subrayaron en sus intervenciones de clausura un mismo objetivo: lograr representación parlamentaria en las Cortes Valencianas para llegar a ser la tercera fuerza política valenciana y, sobre todo, romper las mayorías absolutas para jugar 'un papel decisivo' en el futuro.

Mayor invitó a sumarse al proyecto nacionalista a 'todos los que quieran generar riqueza para el País Valenciano, no sólo económica, sino también cultural, medioambiental' y de toda índole.

Los nacionalistas pretenden concentrar sus esfuerzos en las ciudades para lograr un segmento de voto que tradicionalmente les ha dado la espalda pero, sobre todo, son conscientes de que afrontan una larga campaña porque los votos deben ganarse antes del inicio oficial de la campaña para las elecciones previstas exactamente dentro de un año.

Puchades afirmó rotundo que el Bloc representa ya a 'más de 100.000 valencianos', el número de votos que garantiza la representación en las Cortes.

Entre los delegados se respiraba cierta euforia, avalada por la nutrida representación de invitados que acompañaron a los nacionalistas en la clausura. Por primera vez en la historia de la Comunidad Valenciana, el secretario y el vicesecretario del PP, José Luis Olivas y Juan Manuel Cabot, acudieron a un congreso de otra formación política. Los delegados lograron reconocer su presencia con un tibio aplauso que apagó algún silbido persistente.

Vicent Sarrià y Toni Such, por el PSPV; Joan Ribó, por Esquerra Unida; Joan Francesc Peris, de Esquerra Verda; David Hammerstein, de Els Verds; Toni Ferrando y Carlos Baeta, por Esquerra Valenciana; Joan Sifre, de CC OO; Carlos Lanzas, de UGT; o Vicent Esteve, de la Intersindical Valenciana, fueron aplaudidos. Pero la mayor ovación, con diferencia, fue para el PNV.