Una oportunidad para Irak
La última resolución de la ONU que pone al día las sanciones contra Irak (...) tiene como objetivo reforzar las restricciones sobre el envío de armamento a Irak al mismo tiempo que aumentar la cantidad de alimentos, medicinas y otros bienes necesarios para el pueblo iraquí. (...) La razón verdadera para revisar las sanciones es doble. Por una parte, Irak ha exportado petróleo por encima de las cuotas establecidas por la ONU en el programa petróleo por comida, al mismo tiempo que ha recibido mercancías prohibidas. Por otra, con un triunfo perverso de las relaciones públicas, el invasor vencido de Kuwait se ha presentado como parte perjudicada, mostrando imágenes de niños enfermos o muertos como víctimas del Occidente despiadado. (...) Las nuevas sanciones ahora acordadas deberían servir para contrarrestar parte de esa publicidad perniciosa, así como para mejorar las condiciones de vida de muchos civiles. (...) Pero estas nuevas sanciones sólo tendrán éxito si logran impedir que el régimen iraquí evada las restricciones sobre sus exportaciones de petróleo y refuerzan la prohibición sobre importaciones que puedan tener una utilización militar. (...) Suavizando las restricciones sobre importaciones de mercancías no militares, la ONU ha reconocido algunas de las reclamaciones hechas por Irak desde hace tiempo. (...) Bagdad debería reconsiderar su intransigencia con los inspectores de la ONU. (...) Tanto EE UU como el Reino Unido han rebajado sus amenazas de un ataque militar contra Irak. (...) Bagdad debería saber que ese alto el fuego no dudará para siempre. (...)
Londres, 15 de mayo
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