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EL DEBATE SOBRE LA INSEGURIDAD CIUDADANA

Un guardia civil recibe una brutal paliza al regañar a una joven por pegar a un perro

Raúl A. S., guardia civil de 30 años y actualmente de baja por enfermedad, recibió una brutal paliza el pasado domingo tras intentar impedir que una joven pegase a un perro. La chica llamó a tres amigos y todos golpearon al agente hasta dejarlo inconsciente. Raúl ingresó en el hospital Clínico con un traumatismo craneoencefálico grave y permaneció en la unidad de cuidados intensivos hasta el mediodía de ayer.

Los hechos ocurrieron a las cuatro de la tarde frente al número 19 de la calle de Hortaleza (distrito de Centro). Raúl iba a casa de unos amigos que viven en el inmueble cuando observó cómo una joven, acompañada de una amiga, pegaba a un perro de raza pitbull. Según uno de los amigos de la víctima, testigo de la agresión, el guardia civil pidió a la chica que dejara en paz al animal.

'Ellas se molestaron y llamaron a dos chicos que viven cerca', explica F. L. Entonces, Raúl decidió refugiarse en casa de sus amigos. 'Los chicos empezaron a llamar a nuestro telefonillo y nos amenazaron', recuerda F. L. 'Intentaron forzar la puerta por la que se sube a mi casa. Estaban muy alterados y decidimos avisar a Emergencias 112', añade.

El guardia civil y su amigo, tras comunicar a los agresores que habían requerido a la policía, pensaron que la discusión había terminado. Pero no fue así. 'Un chico volvió a llamar al timbre haciéndose pasar por un policía y entonces bajamos a la calle', recuerda. Raúl se adelantó, y cuando su amigo llegó a la calle vio que los cuatro jóvenes estaban pegandole. 'Le estaban dando patadas por todas partes, le lanzaron contra un coche y salieron corriendo'.

El Samur tardó 45 minutos

F. L. asegura que al poco tiempo llegó la policía, pero no el Samur. 'Volví a llamar a una ambulancia. A Raúl le estaban dando convulsiones y decidimos que lo trasladara la patrulla bajo nuestra responsabilidad', subraya. En la denuncia de los hechos, F. L. sostiene que el Samur tardó 45 minutos en llegar a la calle de Hortaleza. 'La ambulancia vino cuando Raúl estaba ya en el hospital, y pasó de largo. La gente la recibió con aplausos como protesta por la tardanza. Después de 20 minutos apareció otra vez con la policía', asegura.

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Un portavoz del Samur reconoce que tardó 'un poco más de media hora' en acudir al lugar. 'Cuando llegamos, la gente empezó a zarandear y a dar puñetazos a la ambulancia. Nos comunicaron que el herido había sido trasladado al hospital', explica. 'Luego nos dijeron que volviéramos porque podía haber algún otro herido'. El portavoz del Samur dice que la ambulacia se detuvo: 'Si no lo hubieramos hecho, habríamos atropellado a unos cuantos'.

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