Sábado de máximo riesgo

La mayoría de los partidos con los que hoy se cierra la Liga de Primera División verán incrementadas sus medidas de seguridad. El Gobierno no está dispuesto a que se repitan los actos vandálicos de las dos últimas jornadas y el Ministerio del Interior ya ha dado las órdenes precisas para que se aumente el número de policías en determinados campos con respecto a jornadas anteriores. Los dirigentes policiales, además, han planteado a los clubes la necesidad de que amplíen la cifra de guardias de seguridad privada que suelen contratar para otros encuentros.

La Comisión Antiviolencia decidió el jueves declarar partidos de alto riesgo, además del Deportivo-Real Madrid, los encuentros Zaragoza-Barcelona, Osasuna-Alavés y el que disputarán mañana en Tarragona entre el Gimnàstic y el Xerez. La Comisión coloca ese cartel sobre todo a los encuentros en que se esperan aficionados del equipo rival, ante el temor de posibles enfrentamientos entre las dos aficiones, así como también en aquellos partidos que están rodeados de polémicas, tal cual sucede con un Zaragoza que ya se sabe descendido o el Gimnàstic, al que el Comité de Competición ha cerrado su campo por seis encuentros, los mismos que a su entrenador, por los incidentes del pasado sábado.

El Comité de Apelación suspendió el jueves de forma cautelar la sanción de cierre del estadio. Por esta razón el partido se disputará en un Nou Estadi con división de opiniones de quienes llaman a la calma y los que exigen una muestra pública de protesta. El partido, además, es vital para los dos contendientes. El Gimnástic y el Xerez se juegan casi todas sus opciones de permanencia y ascenso, respectivamente.

Vigilancia privada

La Comisión Antiviolencia no ha considerado necesario catalogar de alto riesgo los partidos con el descenso en juego, como son los de la Real Sociedad-Las Palmas, Mallorca-Valladolid y Tenerife-Athletic porque estima que no contarán con presencia de aficionados del equipo visitante. 'Los follones en los terrenos de juego suelen montarse con la gente que viene de fuera', señalaron fuentes policiales de la Oficina Nacional de Deportes.

El Ministerio del Interior, a pesar de esos datos, ha ordenado que se aumente el número de las fuerzas policiales en los campos de todos esos partidos. El incremento, según fuentes policiales, puede llegar en algunos casos casi a doblar la cifra de policías requerida habitualmente para los encuentros de jornadas anteriores. 'Se va a intentar aumentar las fuerzas policiales, como nos ha ordenado el Ministerio, hasta donde nos sea posible', señalaron ayer fuentes de la Oficina Nacional de Deportes, la institución a la que se ha encomendado la seguridad en los estadios de fútbol.

Los delegados y coordinadores de seguridad de los partidos en los que se espera cierta conflictividad, por otro lado, también asistieron a la reunión convocada por la federación de fútbol con los árbitros de esos encuentros. La cita fue un recordatorio de ciertas normas a cumplir -entre otras: puntualidad, marcadores electrónicos apagados, evitar pérdidas deliberadas de tiempo- para que no se altere el desarrollo normal de los encuentros y así no favorecer la posibilidad de conflictos y altercados.