Ferran Camps, histórico dirigente de UDC

Democristiano, catalanista y antifranquista. Ésos eran los trazos ideológicos que definían a Ferran Camps i Vallejo, ex diputado de Unió Democràtica (UDC) en el Parlamento autónomo, que falleció ayer en Barcelona a los 57 años de edad después de una larga enfermedad.

Cursó Derecho en la Universidad de Barcelona y estudió luego Derecho Comparado en Estrasburgo. Colaboró durante el franquismo en diversas publicaciones como el semanario Mundo, Mundo-Diario, las revistas Canigó y Oriflama.

Desde 1980, y hasta 1988, ejerció como diputado en la Cámara catalana. Ese año, una embolia le apartó de la vida política. La recuperación nunca llegó a ser total, pero puso todo ese empeño personal que le había guiado tenazmente en su lucha por las libertades y contra adversidad política.

Camps fue uno de los impulsores de la Assemblea de Catalunya (1971) y desde su militancia política contra la dictadura militar sufrió prisión en Cartagena por asociación ilícita durante el estado de excepción de 1969. Pertenecía al sector de la democracia cristiana catalana decididamente, partidario de pactar con los comunistas para acabar con el régimen de Franco. Ya con la democracia, Camps colaboró en medios de prensa escrita, entre ellos en el Quadern de la edición catalana de EL PAÍS. Entre sus libros y estudios figuran L'hora del Mercat Comú (1971) o sus estudios sobre la repercusión en Cataluña de Luigi Sturzo, impulsor de la DC italiana, y biografías de los catalanistas Joan Baptista Roca i Cavall y Pau Romeva.