El plan Madeca 10 busca reequilibrar el litoral y el interior de Málaga

Pese a haber jugado el papel de motor económico de la comunidad autónoma durante la última década, la provincia de Málaga arrastra aún importantes deficiencias estructurales y un llamativo contraste de renta y condiciones de vida entre el interior y el litoral, según el diagnóstico previo a la redacción del Plan de Actuaciones Estratégicas Madeca 10 que impulsa la Diputación.

Después de cuatro meses de estudios y debates sectoriales, el diseño del plan llega a su fase de diagnóstico. Uno de los codirectores de Madeca 10, el profesor Vicente Granados, resaltó ayer que la bonanza económica esconde la existencia de una serie de indicadores de bienestar claramente por debajo de la media nacional y una importante fractura entre el interior y el litoral.

Granados aventuró que este segundo aspecto puede convertirse en uno de los elementos de más apasionada discusión durante la fase de diagnóstico del plan, porque lo deseable por el equipo impulsor del plan es trazar estrategias para el desarrollo de las comarcas de interior evitando repetir el modelo de desarrollo seguido en la costa, que para muchos alcaldes es un espejo. Así, se refirió a recientes pronunciamientos de empresarios de la construcción y promotores que apuestan por establecer una segunda línea de expansión urbanística en el interior.

Entre las principales carencias de la provincia el documento de prediagnóstico destaca el sistema público de transportes. La costa se ha convertido en una 'ciudad lineal' en la que ahora la movilidad depende casi exclusivamente del vehículo privado, según explicó Granados, quien resaltó la urgencia de acometer el corredor ferroviario propuesto por la Junta y establecer el sistema intermodal previsto en el proyecto del área metropolitana.

Uno de los inconvenientes que tiene especial incidencia en el problema del transporte, pero también de otros servicios públicos, es el importante flujo de población residente no censada y flotante. Según Granados, la población real de la provincia ronda los dos millones de habitantes y no el 1,2 millón que ofrecen los censos oficiales y que son los que determinan las aportaciones de las transferencias del Estado a los ayuntamientos, que se encuentran de esta forma en situación muy deficitaria.

El vicepresidente primero de la Diputación de Málaga, Rafael Rodríguez, de IU, destacó que en los debates sectoriales han participado unas 1.000 personas y recordó que sólo si existe un alto consenso el plan podrá ser efectivo. Madeca 10 persigue definir una serie de líneas estratégicas para el desarrollo que sirvan de referente a las distintas administraciones y a los agentes privados en su toma de decisiones.