'Algún mérito habrá hecho el PP para que nos movilicemos'

Manuel Zaguirre (Almería, 1947) ha dado el relevo a Benito López en la secretaría general de la Unión Sindical Obrera (USO) tras 25 años en el cargo. Una responsabilidad que asumió con 19 años, tras la escisión de 1977, cuando un importante sector de su central se desgajó para pasar a UGT. Sigue definiéndose como centrista, pero eso no le impide criticar la 'excesiva complacencia' que el movimiento sindical ha tenido con los gobiernos del PP.

P. En su discurso de despedida criticó la 'excesiva complacencia' de los agentes sociales con los gobiernos, ¿cree que deberían ser más radicales?

R. La historia nos va a pedir explicaciones, porque la que le armamos a los gobiernos de centro-izquierda fue notable, y a los de centro-derecha no les hacemos ni cosquillas en la planta de los pies. Si aceptamos como correcta la hiperconflictividad que generamos contra los gobiernos de centro-izquierda, es difícil dar por bueno el bandazo con los de centro-derecha, y utilizo su propia denominación.

P. Al PP no se le ha hecho ninguna huelga general, ¿considera que se la ha merecido?

R. Algún merecimiento en el terreno de la movilización, de la confrontación social y sociopolítica sí parece que ha hecho el PP. Seguramente algo menos de conflictividad debimos hacerles a los gobiernos de centro-izquierda y algo más tendríamos que haber hecho, y aún estamos a tiempo, a los de centro-derecha.

P. ¿La reforma del desempleo que ahora se está gestando va a ser conflictiva?

R. Salvo que haya un giro corrector acusado, dudo que se vaya a confrontar frente a estos anuncios de degradar más si cabe la cobertura por desempleo. Porque no se ha hecho nada hasta ahora, o, lo que es más grave, se han hecho cosas que suponen bendecir desde la legitimación sindical situaciones tan malas como la degradación del desempleo: por ejemplo, sancionar el despido libre y gratuito en 1997. Quisiera equivocarme; no por afán de movilización (yo siempre he sido un sindicalista de centro), pero son otros los que han hecho unos viajes espaciales tremendos. Hay que recuperar cordura y hay que repensar el rol del sindicalismo respecto a un empresariado que está crecido, que nos perdió el respeto desde que el centro-derecha está en el poder. El empresariado es el responsable de lo que está sucediendo, y subsidiariamente el Gobierno. Todo eso tendríamos que hacerlo juntos si queremos garantizar una eficacia.

P. Pese a esos llamamientos a la unidad sindical, no ha logrado mejorar las relaciones con UGT y CC OO.

R. No hacemos llamamientos a la unidad sindical ni a la unidad orgánica; creemos en el pluralismo que enriquece. Antes de la unidad de acción tiene que haber una unidad de pensamiento y concretar la media docena de cosas que nos son vitales a todo el movimiento sindical para decir 'a por ellas'. Con el panorama de división no es posible movilizar a la italiana.

P. ¿Para acabar con lo que considera una excesiva paz social?

R. Desde 1996 ha habido un superávit de crecimiento económico, de flexibilizaciones, privatizaciones y liberalizaciones y un evidente superávit de paz social. La paz social en sí misma es un bien (no soy un petardista) siempre y cuando sea reflejo de la justicia social.

P. Pero la USO también practica el diálogo donde tiene representatividad.

R. Por supuesto, el diálogo será siempre nuestra prioridad. Pero procuramos no guiarnos por la filosofía de que más vale cualquier acuerdo que ningún acuerdo.

P. ¿Defiende una reforma de la ley para revisar qué son sindicatos representativos?

R. Nunca asumimos como democrática la Ley de Libertad Sindical, que tenía como intención cerrar el mapa bisindical de manera definitiva.

P. ¿Han desistido de que esa ley cambie?

R. Han pasado veinte años. El otrora líder de la oposición, hoy presidente del Gobierno, se hinchó de modo público a comprometer la democratización de la vida sindical. Las promesas se disolvieron cuando ganó las elecciones.

P. ¿Por qué se retira con 54 años de edad?

R. ¡Porque llevo 25 años en la secretaría general! Eso es un disparate para cualquiera y hace tiempo que vengo buscando el momento.