La fiesta del libro

La mejor manera de celebrar, el martes 23, el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor es, sin duda, leyendo. Y ya que estamos en la era de Internet, nada como aprovecharse de la red para encontrar en ella textos de todos los géneros, épocas y autores para poner en práctica la celebración con la que se recuerda el fallecimiento, en ese día de 1616, de Miguel de Cervantes, William Shakespeare y Garcilaso de la Vega.

Precisamente es Cervantes quien ha dado nombre a uno de los recursos literarios fundamentales de la Internet española, la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. Un sitio fascinante para bibliófilos de toda clase y condición en el que perderse entre clásicos y menos clásicos. Por ejemplo, del autor del Quijote no sólo contamos con los textos digitalizados; incluso se puede escuchar la lectura de su obra.

Otra biblioteca digital española destacada es Badosa.com, con títulos de más de un centenar de autores, generalmente poesías y cuentos. Libros En Red, por su parte, es un sitio dedicado, como tantos otros, a la venta por Internet, pero también incluye una selección de textos gratuitos para descargar.

En El Aleph, donde es preciso registrarse como usuario, se puede seleccionar entre varios países, incluido el nuestro, para leer cosas como las Cinco semanas en globo, de Julio Verne, o La divina comedia, de Dante Alighieri, entre más de 1.200 títulos publicados en español. Mientras que LibroDot ofrece una lista de novelas, comedias y poesías.

También existen bibliotecas de temas más concretos, como Literatura Satírica (que incluye otras secciones) o los textos revolucionarios del Proyecto Espartaco.

Si preferimos descubrir nuevos valores, Letras Perdidas es una revista literaria que incluye cuentos y relatos de autores noveles.

Ya en inglés, la biblioteca virtual de referencia es la del Proyecto Gutenberg, donde están almacenados desde la Biblia hasta Alicia en el país de las maravillas y, ya que recordamos la muerte de Shakespeare, una interminable lista de ediciones de sus obras.

Si aún tenemos tiempo y ganas, podemos buscar entre los enlaces en varios idiomas de Libros Digitales o, sobre literatura latina, los de Lanic.