El Parlamento rechaza por sólo dos votos una propuesta del PP sobre subvenciones

El pleno del Parlamento de Andalucía rechazó ayer por sólo dos votos (45 frente a 47) de diferencia una proposición de ley del PP sobre la regulación de las subvenciones de la Junta de Andalucía, en la que los populares defendían, entre otros asuntos, un mayor control y seguimiento de las ayudas públicas. La iniciativa popular contó con el apoyo de Izquierda Unida, pese a que su portavoz, Concha Caballero, la calificó de 'un refrito bien hecho de la legislación actual'.

El PP pudo ganar la votación, pero le faltaron ocho diputados, mientras que por parte de la coalición de Gobierno no acudieron cinco diputados del PSOE y dos de los tres del Partido Andalucista. La visita oficial del Príncipe de Asturias a Málaga fue el motivo de la mayoría de las ausencias.

El portavoz del PP, Juan Ramón Casero, facilitó unos datos recogidos del Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, según los cuales el Gobierno andaluz ha concedido en el quinquenio 1997-2001 un total 1.803 millones de euros en subvenciones, de los que 541 millones han ido a parar a corporaciones locales.

Según Casero, los ayuntamientos gobernados por el PSOE han salido beneficiados de la concesión anual de 108 millones de euros al acaparar el 59% de las ayudas, frente al 17% de los presididos por el PP, el 9% de Izquierda Unida y el 8% del Partido Andalucista. 'Se utiliza la subvención como un mecanismo de interés partidario', afirmó Casero, quien mantuvo que 'lo que falla es el escaso control y seguimiento' que se hacen de las ayudas públicas. El diputado popular citó el caso FARA como ejemplo de lo que se podía haber evitado con una ley como la propuesta por su grupo.

No hay vacío legal

Por parte del PSOE, José Antonio Marín Rite criticó el proyecto presentado por el PP, pero no la defensa que de él hizo Casero. 'Me ha gustado más su discurso que la iniciativa', dijo. No obstante, el parlamentario socialista aseguró que más que perseguir un objetivo legislativo, el PP pretendía una meta política -'legítima, sin duda', precisó- de 'dibujar un vacío legal, que no existe, y un descontrol de las subvenciones', cuando la Junta de Andalucía dispone de una legislación que 'no es inferior a la del Estado y de otras comunidades autónomas'.

La portavoz de Izquierda Unida, Concha Caballero, consideró 'urgente' la elaboración de una ley específica sobre las ayudas públicas, además de las que ya existen, y ligó este objetivo con el de la reforma de la Administración autonómica. La diputada de IU relató algunas de las advertencias contenidas en los informes de la Cámara de Cuentas de Andalucía sobre las subvenciones y consideró que al mismo tiempo que 'hay una excesiva lentitud' en algunos casos, en otros hay 'unas destrezas innecesarias'.