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Inversión | CONSULTORIO
Columna
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Turismo y segunda casa

Cada vez es más evidente que el desarrollo de la sociedad del ocio en España ha venido consolidando los viajes turísticos como un bien de primera necesidad. Esa tendencia ha deparado una vinculación del turismo a la adquisición de una vivienda en la costa, cumpliendo un doble objetivo: ser lugar de descanso y activo destino de la inversión familiar.

El resultado ha sido una España costera donde prima un modelo de ocupación extensiva del territorio, con una tipología de alojamientos basada en apartamentos asociados a la segunda residencia. Sin embargo, hay que constatar que si esta tendencia continúa se puede poner en peligro la competitividad del turismo de costa y los valores perseguidos por los adquirentes de una segunda residencia en una zona turística.

Es necesario poner límites al crecimiento urbanístico de las zonas turísticas y primar el alojamiento reglado en ellas

En relación con la competitividad, hay que hacer notar que el alojamiento es determinante en el modelo de una zona turística por su efecto sobre la satisfacción del turista, además de por su capacidad de extender los efectos sobre el resto del tejido económico de la zona. En un territorio donde priman los apartamentos no reglados frente a los equipamientos hoteleros se genera un uso estacional de los mismos y unos estándares de calidad menores que los ofrecidos por un alojamiento reglado, donde estos estándares están sometidos a sistemas de control. Además, ese uso estacional suele impedir que se genere a su alrededor empleo estable y una oferta de servicios complementarios.

Por otra parte, la intensidad de la edificación residencial, junto con el uso estacional y la falta de servicios asociados, está provocando un deterioro del territorio que puede afectar tanto a la satisfacción del visitante como al propio valor de la inversión inmobiliaria.

Esta situación ha de hacernos pensar en la necesidad de introducir instrumentos de ordenación que limiten el crecimiento urbanístico de las zonas turísticas y compensen su composición con una mayor presencia de alojamientos reglados en todas sus tipologías.

Óscar Perelli es socio director de Consultores de Administraciones Públicas (Grupo Analistas).

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