Un ciclo malagueño permite estrenar lo último del cine documental español

El cine documental español está en alza. De ser una aventura destinada a rellenar programación a la que pocos realizadores se atrevían se ha pasado a producir 30 títulos al año, muchos excelentes. Lo demuestra el ciclo La realidad recreada, que auspicia la sección de documental del Festival de Cine Español de Málaga, que hoy termina y donde la presencia de directores y el estreno comercial de diez títulos ha atraído a numeroso público.

La proyección hoy en el cine Albéniz de Extranjeros de sí mismos, de Javier Rioyo y José Luis López Linares (17.30), Caminantes, de Javier Corcuera (19.30) y En construcción, de José Luis Guerín (21.30) cerrará un ciclo donde se han estrenado comercialmente diez documentales latinoamericanos y españoles de 2001. Han asistido varios directores: Javier Corcuera, Jaime Camino, Manuel Martín Cuenca o Javier Rioyo. El crítico de cine de El País Mirito Torreiro conducirá el debate de En construcción, ganadora del Goya este año.

Una media de 150 personas por sesión y la participación del público en los debates llevan al director del ciclo, Moisés Salama, a considerarlo 'un éxito'. Junto a las citadas se han exhibido La espalda del mundo, Asesinato en febrero, El juego de Cuba, Los niños de Rusia, La guerrilla de la memoria o El caso Pinochet. Salama cree que la respuesta del público justifica que estos productos entren más en las salas comerciales.

Torreiro admite que esta cosecha 'ha sido buena, pero no mucho mejor que la de años anteriores'. Añade que esto debería incentivar a las televisiones a 'invertir en documentales'. Y pone un ejemplo: en Cataluña, TV3 está programando 'una buena serie documental', El meu avui, los miércoles en prime time y supera el 30% de audiencia.

Si hay alguien a quien se ha identificado con el género en España en los últimos años, por el éxito internacional de su producción junto a su socio José Luis López Linares, es el periodista y escritor Javier Rioyo. Con Asaltar los cielos, lograron abrir mercados en 20 países. 'Uno de los mayores déficits que tenemos es no saber vender y distribuir. No vamos a copar las grandes pantallas pero si se hace bien, un documental es rentable', dice.