_
_
_
_
_
Tribuna:DEBATE
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Ayudas, éxitos e ingenio

El deporte, como todas las actividades que desarrolla el hombre, requiere el mismo impulso y mimo en todas las sociedades y pueblos para evitar los desequilibrios entre unos y otros, y evitar caer en las euforias triunfalistas del deporte profesional, que parece querer acaparar la exclusividad deportiva. En consecuencia, nos encontramos que haciendo un seguimiento pormenorizado, la relación ayuda-éxito es directamente proporcional, consiguiendo afortunadamente que, gracias a la voluntad política de impulsar el deporte, los clubes deportivos podamos trabajar consiguiendo un nivel más que aceptable.

De esta forma, Valencia no sólo se acercó al grupo de comunidades más desarrolladas deportivamente hablando, sino que muchos de nuestros deportistas consiguen importantes logros a nivel internacional. Esta voluntad política de impulsar y ayudar al colectivo de entidades deportivas provoca a su vez que éstas puedan desarrollar también su función social, pues su estructura en la gran mayoría se basa en la pirámide deportiva, en donde muchos equipos de distintas edades y categorías componen los diversos clubes.

Por todo esto, llaman la atención las manifestaciones del director general del Deporte valenciano solicitando a todos los clubes ingenio e imaginación para poder sobrevivir; sorprendiendo estas declaraciones por su falta de visión y liderazgo político deportivo hacia unos dirigentes deportivos que, tal vez si cogieran con la misma clarividencia el mensaje, lo que deberían hacer es ser menos imaginativos y más sensatos. Es decir, coger trastos y marcharse.

¿Acaso el deporte, a través de sus éxitos no está contribuyendo al desarrollo de su sociedad? ¿Por qué además del trabajo, ingratitudes y sacrificios de todo tipo nos tenemos que convertir en ingeniosos administrativamente hablando?

Los clubes valencianos ya somos una realidad. Hace tiempo que dejamos de ser virtuales, gracias, por supuesto, a la voluntad política. Ahora no lo estropeemos, superemos más si cabe el nivel deportivo actual y, ante todo, felicitémonos porque sinceramente creo que, entre todos, a Valencia y a esta Comunidad la hemos colocado fuera de la marginalidad deportiva y en el umbral del éxito.

Carlos Vilar es presidente del Club Balonmano Valencia.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_