Los jefes palestinos lanzan una ofensiva total contra Israel

Tres misiles caseros Qasam-2 -con un alcance de 12 kilómetros y fabricados por el movimiento de resistencia islámica Hamás- fueron disparados desde Gaza contra la ciudad israelí de Sderot. Por primera vez, uno de los misiles alcanzó un apartamento e hirió a tres personas, entre ellas dos niños. La jornada fue de nuevo una demostración de violencia desatada, represalias y respuestas encadenadas. De madrugada, un militante de las Brigadas de Al Aqsa, brazo armado de Al Fatah, mató a tres israelíes e hirió a otros 40 en un restaurante de Tel Aviv. Más tarde, la Yihad islámica reivindicó un atentado suicida en un autobús de la ciudad de Afula, que causó la muerte al palestino que llevaba el explosivo y a un israelí.

Posteriormente, y en el curso del entierro en Ramala de los niños palestinos muertos ayer por el Ejército israelí, Barguti lanzó su consigna de ataques generalizados y Yibril Rayub, jefe de seguridad de Cisjordania, dijo que la policía palestina no va a detener a los activistas que exige el Gobierno israelí. Tras su reunión de ayer, el Gabinete del primer ministro Ariel Sharon decidió intensificar las acciones militares y mantener el confinamiento de Yasir Arafat en Ramala. Tras el lanzamiento de los misiles Qasam-2, helicópteros y aviones F-16 bombardearon objetivos en Cisjordania y Gaza y alcanzaron un coche en el viajaba un ayudante de Barguti, que murió junto a otros dos palestinos.