Semana redonda

La inversión ha apostado definitivamente por seguir la estela del mercado estadounidense, al que considera en mejor posición que el europeo para reflejar los vaivenes de la economía.

La Bolsa de Nueva York volvió a abrir al alza tras conocer los datos de ingresos y gastos personales de diciembre, que apuntan hacia un saludable nivel de consumo, el incremento en los gastos en construcción en enero y, sobre todo, el índice de actividad manufacturera de febrero, que superó los 50 puntos por primera vez desde julio de 2000.

La economía estadounidense muestra signos de recuperación y los inversores lo celebran, incluso los europeos, que ayer conocían el descenso del PIB italiano en el cuarto trimestre del pasado año. La actividad se ralentiza en Europa, pero en los mercados de valores se apuesta por la inercia del conjunto antes que entrar en valoraciones más complejas que crearían problemas.

La bolsa española cierra la mejor semana desde finales de septiembre, con una subida del 7,42% en el Ibex 35. La importancia de este avance se pone de manifiesto al comparar esta semana con el conjunto del año pasado, en el que el Ibex 35 cedió el 7,82%.

La contratación en el Mercado Continuo fue de 1.402,08 millones de euros, una cifra baja que no justifica lo abultado de los avances, sobre todo porque entre dos valores, Telefónica y Repsol YPF, contrataron más del 40% del total del mercado. Ambas sociedades han presentado unos resultados anuales a la baja y los analistas muestran muchas dudas sobre su capacidad de recuperación, si las circunstancias no cambian lo suficiente, pero ayer fueron de los que más animaron la sesión.

El mercado secundario de deuda pública también tuvo una sesión agitada, con una importante caída de los precios que llevó a la rentabilidad a 10 años hasta el nivel máximo de este ejercicio, con el 5,18%.