El net.artista inglés Stanza protagoniza el festival Zeppelin 2002

Instalaciones interactivas, video-creación, conciertos, net.art, talleres de software y conferencias componen la programación de la sexta edición de Zeppelin, el festival de arte sonoro que se celebra en el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) hasta el 2 de marzo. En esta ocasión se llama Permanent Flux. 'El título evoca el movimiento artístico del siglo XX, Fluxus, y la corriente de magma eléctrico que conecta el mundo con las vibraciones sonoras', explica Clara Garí.

El homenaje a Fluxus se concreta en un área dedicada a uno de sus representantes: el alemán Wolf Vostell, del que se exhibe Sinfonía Fluxus para 40 aspiradores, un ejemplo de los happenings que el artista realizaba transformando instalaciones en estruendosas obras sonoras. Actualmente, la pieza funciona automáticamente gracias a un programa creado por José Manuel Berenguer a partir de la partitura original.

La exposición se completa con Orquesta de Sombras, una instalación de Peter Vogel que combina las posibilidades de los sensores fotosensibles y sendas instalaciones de Staalplaat Soundsystem y Greyworld.

Sin embargo, la estrella de Zeppelin es el artista inglés Steve Tanza, alias Stanza, que presentará su obra el 2 de marzo. Stanza estrenará Inner City y Sound City, secciones de su proyecto The Central City, una especie de collage multimedia que reflexiona sobre el ambiente, la urbanización y el espacio. El artista presenta también Amorphoscapes, unas pinturas interactivas y autogenerativas, es decir que cambian por sí solas o por intervención del usuario. 'El sonido y las imágenes en 3D contribuyen a crear una experiencia multisensorial inmersiva. La percepción de la obra depende del tipo de navegación', dice Stanza.

Soundtoys, del mismo autor, encabeza la sección Zeppelinks: un espacio donde los artistas interesados en investigar recursos para la creación sonora y visual en la red pueden presentar sus trabajos. Juegos, música generativa, entornos interactivos, películas en shockwave y aplicaciones que explotan el potencial multimedia de Internet, componen una colección de 50 creadores.