La Consejería de Turismo prevé un año de transición con un primer semestre 'bastante duro'

La incierta situación económica de los principales países emisores de turismo a Andalucía no permite a la Consejería de Turismo estimar previsiones fiables sobre el comportamiento del sector para este año. El consejero, el andalucista José Hurtado, avisó ayer en la Feria Internacional de Turismo de Madrid (Fitur) que el primer semestre será 'bastante duro', aunque apuntó indicios para pensar en nuevas tasas de crecimiento en la segunda mitad del año. Las cifras de 2001 han sorprendido a los responsables políticos, ya que el número de turistas creció un 10,5%.

Este crecimiento está seis puntos por encima de la previsión más optimista y se explica fundamentalmente por el buen comportamiento del mercado nacional. Andalucía recibió el año pasado 20,6 millones de visitantes que dejaron unos ingresos de 13.162 millones de euros (2,190 billones de pesetas), un 7,8% más que en 2000.

'Nadie en estos momentos puede hacer previsiones sin caer en la temeridad porque estamos sujetos a unas circunstancias que no controlamos desde ningún destino turístico', dijo Hurtado, quien pese a todo calificó de estable la situación, que dijo tampoco permite hablar de una crisis profunda y larga. El Sistema de Análisis y Estadística del Turismo de Andalucía (Saeta), que habitualmente dibuja estimaciones en un abanico de escenarios optimista y pesimista, no ha formulado este año previsiones porque la variable de incertidumbre que caracteriza la coyuntura económica no puede recogerse en los modelos de simulación empleados. La Organización Mundial de Turismo (OMT) estima que este año habrá un crecimiento cero en el turismo internacional.

Saeta ha realizado un sondeo entre 52 hoteles y agencias de viaje receptivas que trabajan con reservas del que deduce que existe una situación de estabilidad, aunque durante los primeros seis meses del año se prolongará la tendencia de reducción en la afluencia de turistas extranjeros que ha caracterizado el último trimestre de 2001. Del sondeo se deduce que los emisores europeos mantienen sus contrataciones en niveles similares a los del año pasado, mientras que en los mercados de larga distancia como Estados Unidos, Canadá y Japón, más influenciados por los efectos de los acontecimientos del 11 de septiembre, habrá un retroceso, aunque la presencia de éstos tiene poco peso en Andalucía.

Turismo espera que el mercado nacional mantenga sus tasas de crecimiento, motivo por el que centrará en él buena parte de sus esfuerzos de promoción. Hurtado recalcó ayer que el sector turístico andaluz tiene un 'excelente futuro' a medio y largo plazo. El consejero fundamentó su optimismo en los datos de coyuntura económica que muestran signos de recuperación en Estados Unidos y en las previsiones de la Unión Europea, que descartan que en la zona euro se vaya a producir una recesión (tasas de crecimiento negativo durante dos trimestre consecutivos). La comunidad andaluza, según Hurtado, está muy bien posicionada para aprovecharse del incremento de los viajes en avión que según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) se multiplicarán por dos en la próxima década.

Además, Hurtado reconoció que es necesario tomar medidas para mejorar algunos aspectos de la representatividad otorgada a los distintos segmentos turísticos en el pabellón de Andalucía y que han suscitado algunas críticas, principalmente del Patronato de la Costa del Sol.

El consejero insistió en que el modelo de presentar toda la oferta andaluza bajo la misma marca y estructurada por segmentos y no por territorios es el más adecuado, pero admitió que existen quejas por la distribución de espacios que se analizarán para diseñar el pabellón de la próxima edición. El PP pidió ayer la comparecencia parlamentaria de Hurtado para que explique los criterios de esta promoción y aprobó una moción en el Ayuntamiento de Málaga en la que queda constancia del malestar del consistorio por la escasa representatividad que se ha dado a la provincia.