Arenas copa con su equipo las principales vacantes de la nueva ejecutiva del PP

Javier Arenas, el refrendado secretario general del PP, no ha acaparado mucho protagonismo en esta convención por las polémicas propuestas de Francisco Álvarez Cascos sobre la sucesión, pero sí ha logrado su objetivo de fondo: formar un amplio equipo de su máxima confianza en la nueva ejecutiva. De las nueve novedades del Comité de Dirección, siete han sido copadas por colaboradores de su entorno. El único cargo del partido aparentemente defenestrado, Mercedes de la Merced, primera teniente de alcalde en Madrid, ha recibido la promesa de Aznar de que tendrá 'buenas noticias en breve'.

Aznar y Arenas conversaron por primera vez sobre el perfil de la nueva ejecutiva del PP que debía salir de este XIV Congreso a finales de octubre. Y lo hicieron más veces en noviembre, tras confirmar en privado el presidente al secretario general del partido que debía continuar en su puesto. Aznar está más que contento del 'impulso y la actividad propia de un partido de oposición' que Arenas le ha conferido al PP en esta etapa. Pero él no se sentía lo suficientemente cómodo con el equipo que heredó en la sede del PP del anterior periodo.

Pidió entonces a Aznar más margen de maniobra para confeccionar el nuevo Comité de Dirección y existen numerosas pruebas para corroborar que se ha salido con la suya en todas sus pretensiones, menos en sustituir a su teórica mano derecha, el coordinador de Organización, Pío García Escudero, que mantiene un hilo directo con Aznar. El propio Arenas habló personalmente con varios de los descartados, casualmente próximos a García Escudero, y les indicó de forma bastante explícita que necesitaba esos puestos para dirigentes de su entorno y con dedicación exclusiva al partido.

El número dos del PP, en definitiva, ha colocado o respaldado de una manera más o menos directa al nuevo coodinador de Estudios y Programas, Eugenio Nasarre, próximo sobre todo al equipo de fontaneros que comanda en La Moncloa el jefe de gabinete de Aznar, Carlos Aragonés. Nasarre, sin embargo, procede de una ideología claramente demócratacristiana, como Arenas en sus inicios, y no liberal, como Aragonés.

Sustituye en el cargo a la concejal madrileña Mercedes de la Merced, que entra en el Comité Ejecutivo sin funciones entre los 30 vocales de la candidatura presentada ayer por Aznar para ser reelegido presidente del PP. Ella se tomó muy bien esta caída porque Aznar se la explicó con mucho cariño y comprensión. Es más, el presidente le dio a entender claramente que debía tener 'confianza' y que recibiría 'buenas noticias en breve'.

Concejales del Ayuntamiento de Madrid y dirigentes del PP interpretaron rápidamente que esa señal de Aznar quería decir que será la próxima candidata al Ayuntamiento de la capital de España, una plaza emblemática para todos los partidos. Otros ediles y responsables del partido sugirieron que podría significar que De la Merced accederá a una relevante responsabilidad en el Gobierno central en una próxima remodelación, que podría ejecutarse tras el verano y ante los congresos regionales y provinciales de otoño.

Aznar, en la lista de 35 vocales sin responsabilidades al Comité Ejecutivo, mantuvo básicamente los mismos nombres y perfiles con la incorporación de varios de los ponentes, como Pilar del Castillo, Gabriel Elorriaga o Elvira Rodríguez. Y se dejó otro momento para resaltar que entre los cinco puestos añadidos por él aparecían el polémico Alejo Vidal-Quadras y Adolfo Suárez Illana, el hijo del ex presidente de la UCD. La lista fue aclamada a las 22.00 por 2.528 votos a favor (99,6% de las papeletas válidas). Horas antes, el congreso había aprobado sin fisuras todas las ponencias.