Zaplana y Mas discrepan sobre el futuro papel de las regiones en Europa

El presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, mostró ayer una exquisita prudencia para hablar del futuro papel de las regiones en el seno de la Unión Europea (UE) tras entrevistarse con el consejero catalán y delfín de Jordi Pujol, Artur Mas. Zaplana se mostró partidario de aumentar el peso de las regiones en el marco europeo, pero sin cambiar la actual estructura de la UE. Una opinión que contrapuso a otras posturas más reivindicativas como la del propio Mas, que reclamó voz propia en Bruselas para las autonomías con capacidad legislativa, o la de otras federaciones del PP.

El tono utilizado ayer por Zaplana estuvo alejado de la euforia que le llevó el pasado mes de diciembre a convocar un pleno extraordinario de las Cortes Valencianas para explicar la decisión del Grupo Popular Europeo de nominarlo como presidente del Comité de Regiones (CdR). Zaplana, que se entrevistó con Mas a petición de éste para hablar del futuro marco europeo, aseguró que el CdR 'es el único vehículo eficaz para plasmar el peso de las regiones en el conjunto de la Unión Europea'. 'La posición de la Generalitat catalana no es exactamente coincidente con la que nosotros mantenemos, pero podemos coincidir en algunas aspiraciones', dijo Zaplana.

Artur Mas reconoció: 'El PP y CiU tenemos posiciones divergentes sobre el papel de las regiones en la UE'. El consejero catalán reconoció que su partido defiende 'sin mucho éxito que las comunidades autónomas tengan presencia directa en los órganos de decisión de la UE'. Una posición que, según el delfín de Pujol, requiere tiempo y mucha constancia, pero que no impide apoyar a los populares para que el Comité de las Regiones tenga más peso en la Unión Europea. 'Aquí sí coincidimos', dijo.

Eduardo Zaplana argumentó que es 'partidario de que el peso de las comunidades autónomas crezca en la medida en que pueda crecer en la arquitectura de la Europa actual: el Consejo de Ministros, la Comisión y el Parlamento Europeo y el CdR'. El presidente de la Generalitat recalcó que tanto si ocupa finalmente la presidencia del CdR, como si es la vicepresidencia, impulsará el peso de este organismo. La decisión de quién ocupará primero la presidencia del CdR, si el candidato popular o el socialista, depende de la correlación de fuerzas europeas y de las complejas negociaciones que hacen difícil prever ahora el resultado final.

El jefe del Consell afirmó que 'posiciones distintas' a la suya es 'muy difícil que prosperen' porque no todos los países de la UE tienen la vocación regional de España o Alemania.

Zaplana se distanció incluso de las posiciones de su propio partido en Galicia, que ha presentado una enmienda al congreso del PP en el que pide participación de las regiones en las reuniones de los consejos de ministros que traten temas que les afecten. 'La enmienda del PP de Galicia es muy similar a lo que defendemos en el resto de España. Discrepamos, a lo mejor, en cómo se formaliza esa participación'.

El dirigente del PP indicó que en su reunión con Artur Mas no se analizó la intervención de Aznar ante el Parlamento Europeo y las críticas recibidas. Por contra, el presidente de la Generalitat instó a las comunidades autónomas a utilizar la presidencia española de la UE para intentar avanzar y puso como ejemplo las cumbres europeas previstas en Barcelona y Valencia.

Tras la entrevista, Artur Mas y Eduardo Zaplana reconocieron que habían tratado de pasada el conflicto que mantienen por la regulación del Archivo de la Corona de Aragón. El Consell instó el pasado martes al Gobierno central a presentar un recurso de inconstitucionalidad contra la ley catalana que integra en el sistema de la Generalitat de Cataluña el Archivo de la Corona de Aragón. El jefe del Gobierno valenciano se mostró seguro de que hablarán para hallar una solución al conflicto, lo que implicaría una retirada de los recursos judiciales que estén en marcha si hay una solución. Artur Mas insistió en que el ánimo de la Generalitat catalana no es de confrontación y expresó su deseo de llegar a un acuerdo, aunque eludió comprometerse al respecto.