Vitoria presenta las tres alternativas de trazado para el futuro tranvía
El futuro tranvía de Vitoria, un proyecto cuya financiación ha sido garantizada por las tres instituciones implicadas -el Gobierno vasco, la Diputación de Álava y el Ayuntamiento-, unirá en su primera fase el norte de la ciudad con el centro, por un trazado cuyas tres alternativas fueron presentadas ayer antes de mostrarse en una exposición pública. Esta infraestructura, que tendrá una longitud de cerca de ocho kilómetros entre ida y vuelta, costará 51,3 millones de euros y a partir de ahora debe definir cuál será su recorrido por el ensanche de Vitoria, la zona más problemática dada la densidad de tráfico y la estrechez de las calles.
La empresa de ingeniería encargada de estudiar los posibles recorridos ha presentado un trazado que cuenta con dos ramales en el extremo norte de la ciudad (partiendo de los barrios de Abetxuko y Lakua respectivamente), que confluyen en el arranque de la Avenida de Gasteiz. Hacia la mitad de esta arteria se abren las tres posibilidades, que discurren por el centro de la capital alavesa hasta llegar a la calle Pío XII, cercana a la Plaza de Toros y final del trayecto en todas las alternativas. Los ejes principales que se disputan el paso del tranvía y sobre los que deberán debatir ciudadanos y Ayuntamiento son la calle General Álava, semipeatonalizada y de gran presencia comercial; Florida, una de las arterias con mayor volumen de tráfico, y el corredor del ferrocarril, paralelo a las vías férreas, que es la opción que ofrece más dificultades de negociación por ser los terrenos propiedad de Renfe.
Los tres trazados manejan cifras similares. Supondrán una eliminación de entre 200 y 300 aparcamientos de superficie, tendrán una longitud que se mueve entre los 7,6 y los 8,5 kilómetros, y podrían transportar cerca de ocho millones de viajeros, frente a los más de doce millones de usuarios que mueve la red de autobuses urbanos actualmente.
Los expertos destacan que el recorrido de extremo a extremo tardará en realizarse un cuarto de hora, dado que los vehículos circularán a una velocidad media de 23 kilómetros por hora, con paradas cada 400 metros y una frecuencia de seis minutos entre un tranvía y el siguiente.
Las mayores dificultades técnicas se encuentran en el tránsito del tranvía por el céntrico ensanche de Vitoria. Durante el mes de febrero los ciudadanos tendrán la posibilidad de plantear sus opiniones y ver la exposición del proyecto, antes de que la corporación adopte una decisión.
