Un italiano entrega toda su pensión para pagar un capuchino

Los nuevos precios en euros han desatado las primeras críticas entre los consumidores y algunas confusiones al equiparar las cantidades en euros con las mismas cifras de la vieja moneda nacional.

- 600 euros por un capuchino. Minutos después de recibir su pensión en euros, un italiano intentó pagar un capuchino con la módica cantidad de 600 euros (casi 100.000 pesetas), confundiendo sin duda el valor de esta cantidad con el de las liras. Amable, pero firmemente, el anciano exigió el cambio en la moneda nacional, algo a lo que el camarero se negó. Los errores entre las dos divisas también motivaron el ingreso de 400.000 euros en la cuenta corriente de una sevillana en Málaga. La alegría para la agraciada fue breve, ya que el error se subsanó 'inmediatamente'.

- Todo a un euro. Los propietarios de las tiendas Todo a Cien han decidido convertirlas en Todo a un euro. Un botón de muestra de picaresca andaluza está en el caso de algunos panaderos de Sevilla que, según ellos, para facilitar cálculos a los compradores, piden por una barra de pan, cuyo precio era 100 pesetas, un euro. 'Para evitar los céntimos', dicen.

- Baja 'Le Figaro'. El diario conservador francés ha reducido su precio en un 7% y lo ha fijado en un euro. Pero debe ser una excepción en un mar de abusos, según fuentes de la revista 60 Millions de Consommateurs.

- Bombones más caros. La firma de chocolatinas Haribo también estima que hay que aplicar la filosofía de 'a nueva moneda, nuevos precios'. Pero ha sido más comprensiva con el consumidor. Costarán más sus deliciosos bombones, pero ahora se fabricarán más grandes.

- Nace la 'euroburger'. Mc Donald´s ha decido lanzar a partir de ahora la llamada euroburger, una hamburguesa que costará un euro.

- Una gran fortuna. Una francesa de 69 años fue el jueves a un banco de Amiens, en el norte del país, y sin pestañear pidió que le cambiaran en metálico la bonita suma de 1,8 millones de francos que llevaba en una saca con 3.600 billetes de 500 francos, fruto, según dijo a los empleados, de una herencia que tenía guardada en un baúl. Recibió a cambio 275.000 euros en billetes de 500.

- Pago falso. Una joven extranjera pagó una botella de vino espumoso en un bar céntrico de la ciudad italiana de Siena con un billete falso de 100 euros. El cajero sospechó y llamó a la policía, pero la mujer ya había abandonado el local.

- Billetes defectuosos. En Finlandia, al menos siete billetes defectuosos de 100 euros han sido descubiertos en Vihti, en el noroeste del país, anunció ayer un portavoz del Banco Nacional, que explicó que les faltaba el holograma. Otros cuatro billetes con el mismo problema han sido detectados en Bulgaria por el banco de negocios Biochim. Más de tres millones de euros han sido ya vendidos en el país del este europeo, candidato a ingresar en la UE.