UGT critica la falta de previsión de la patronal de banca ante el euro

La Federación de Servicios de UGT-PV denunció ayer que, con motivo de la puesta en circulación del euro, 'se están produciendo prolongaciones indiscriminadas de la jornada laboral' de los trabajadores de bancos y cajas 'de hasta cuatro horas diarias'. El sindicato, además, aseguró que 'no hay euros suficientes para atender la fuerte demanda de cambio'. UGT considera a las patronales del sector financiero (bancos y cajas) 'responsables' de las dificultades que se están produciendo con la puesta en circulación del euro y que afectan tanto a los ciudadanos como a los trabajadores de las oficinas bancarias. El sindicato considera que la falta de previsión en la distribución y el reparto de cuotas de la nueva moneda contribuye a generar 'mayor volumen de trabajo' que obliga a realizar 'un esfuerzo irracional a los trabajadores'.

En la nota difundida la Federación de Servicios de UGT también considera que 'la realización de horas extraordinarias de forma involuntaria puede hacer incurrir a la patronal en un fraude en las cotizaciones a la Seguridad Social, ya que no se ha recibido ningún tipo de garantía para el abono de esas horas extraordinarias involuntarias'. La patronal, añade, 'ha eludido una negociación reiteradamente demandada y ha implantado unilateralmente condiciones de trabajo'. Además, el incremento de efectivo en las oficinas, al convivir fondos en euros y en pesetas, 'no ha comportado un aumento de las medidas de seguridad, al tiempo que el servicio de recogida de la antigua moneda no está siendo el adecuado'.

También ayer, diversos sectores del comercio insistieron en la falta de euros que están sufriendo algunos profesionales del sector. El secretario general de la Federación Valenciana de Comercio (Fevalco) atribuyó esta carencia a la 'falta de previsión u organización de bancos y cajas, y sobre todo, por parte del Banco de España o del Banco Central Europeo'.

Primeras rebajas en euros

La Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios (Avacu) recomendó ayer que los consumidores denuncien 'los redondeos al alza injustificados' en las rebajas de invierno que se inician el lunes, las primeras desde la entrada del euro. Avacu recordó que durante el periodo de transición se pueden pagar los productos con euros o pesetas, y que los establecimientos que aceptan tarjetas habitualmente no pueden rechazarlas en rebajas si no lo publicitan en el punto de venta.

Avacu y la Unión de Consumidores recordaron que la mayoría de los comercios en estas rebajas tendrán en las etiquetas cuatro precios (los antiguos y los nuevos en euros y en pesetas) y recomendaron la verificación del doble etiquetado. La secretaria general de la UCE, Ana Zarzuela recomendó que los compradores exijan el precio antiguo, que debe figurar marcado en la etiqueta junto al precio de rebajas y también que los consumidores pidan 'la factura de compra'.