La Junta no ofrece nuevas inversiones para la candidatura olímpica de Granada en 2010

El próximo 23 de enero, el Comité Olímpico Español (COE) tendrá que elegir entre Granada y Jaca como sede española aspirante para la celebración de los Juegos Olímpicos de invierno de 2010. A tan pocos días para ese momento, la Junta de Andalucía se ha limitado a ofrecer su apoyo a la ciudad andaluza de una forma más teórica que práctica. El consejero de Presidencia, Gaspar Zarrías, se limitó ayer en Granada a enumerar como inversiones para este nuevo año los proyectos que ya se han realizado y las partidas que se habían anunciado hace meses.

Zarrías, que será este año rey mago en Granada, no ha traído a la ciudad grandes regalos en forma de espléndidos compromisos de financiación para su candidatura olímpica. Ayer firmó, en representación de la Junta, un protocolo de colaboración con el Ayuntamiento en el que la administración autonómica sólo ofrece para este año 100 millones de pesetas (601.033 euros), que ya se hicieron públicos hace meses. Además, esta partida se destina exclusivamente a sufragar algunos gastos de mantenimiento de la oficina olímpica, el órgano que promueve el proyecto. 'Es una ayuda al Ayuntamiento para financiar las actividades y el funcionamiento de esta oficina', sintetizó el consejero.

Sólo durante el año pasado la oficina olímpica gastó 283 millones de pesetas (1,7 millones de euros), a pesar de que en ese período las actividades de promoción de la candidatura se prevén mucho más limitadas que las que tendrá que llevar a cabo este año si finalmente el COE opta por Granada. La ciudad parece tener posibilidades de vencer a Jaca en la elección nacional, según el informe no vinculante de la comisión de evaluación. Sin embargo no ha contado para ello con la mejora de sus infraestructuras hasta el momento.

El consejero de Presidencia mencionó ayer, entre los compromisos de la Junta con esta candidatura, los 330 millones de pesetas (1,98 milllones de euros) que la Consejería de Turismo anunció el año pasado para la construcción de un palacio de hielo en la ciudad.

Esta obra depende también del presupuesto del Gobierno central, a quien Zarrías instó para que colabore económicamente. 'El Gobierno tiene la obligación de mojarse', declaró el consejero, al tiempo que pidió a la Secretaría de Estado para el Deporte que aporte recursos 'igual que ha hecho en otras partes del país'. En cualquier caso, el representante de la Junta aseguró que el dinero previsto para el palacio de hielo 'es una partida que está consignada y llegará' independientemente de la acción del Gobierno de la nación.

Mejoras en la estación

El consejero incluyó también en su enumeración de compromisos de la Junta, los 3.500 millones de pesetas (21 milllones de euros) gastados este verano en la mejora de las instalaciones de Sierra Nevada por Cetursa, la empresa pública que gestiona la estación de esquí. Sin embargo, estas reformas no tienen como principal finalidad la preparación de Sierra Nevada para los Juegos Olímpicos, sino su modernización para mejorar la explotación de las instalaciones cada año.

La Junta, según puso de manifiesto ayer Zarrías, ha demostrado con estos proyectos su 'pleno apoyo a la candidatura granadina para que ésta pelee con garantías en la carrera de obstáculos que le espera'. El consejero se mostró convencido de que el primero de esos obstáculos (la elección como candidatura que represente a España) 'se superará sin grandes inconvenientes', aunque admitió que los siguientes pasos 'serán más complicados'. El alcalde de Granada, José Moratalla, anunció que si al final Granada tiene que competir con otras ciudades del mundo la oficina olímpica tendrá que diseñar nuevas estrategias de promoción a partir de febrero.

Moratalla explicó que aún no se conoce el nombre de todas las sedes que pueden competir con Granada y pidió prudencia hasta conocer la decisión definitiva del COE. Sin embargo, el consejero afirmó que Granada tiene grandes posibilidades de conseguir la designación por el 'rotundo éxito' obtenido en la celebración de los Campeonatos del Mundo de esquí alpino disputados en 1996 en Sierra Nevada, 'el sur del sur de Europa'. Aquellos campeonatos se celebraron un año después de lo previsto por falta de nieve, un problema que padece la estación también este año.