La oposición arrincona a Pujol por el caos que siguió al temporal

Jordi Pujol tuvo que lidiar ayer a cuatro bandas para defender la actuación de su Gobierno durante el temporal de frío y nieve que azotó Cataluña el pasado fin de semana. En una acción coordinada como no se recuerdan en el Parlamento catalán, las tres formaciones de izquierda -socialistas, Esquerra e Iniciativa- y el Partido Popular arremetieron contra el presidente catalán quien, más allá de reconocer hipotéticos errores de planificación ante una situación de emergencia, tuvo que cerrar filas y emplearse a fondo para transmitir una imagen de unidad de su Gobierno.

Y es que la oposición se cebó en el hecho de que, mientras desde el Departamento de Interior se recomendaba a los ciudadanos no salir a la carretera y Cataluña estaba en la noche del viernes al borde del colapso, el conseller en cap, Artur Mas, encargado de coordinar la acción del Ejecutivo, optó por irse de fiesta a una discoteca de la costa.

La izquierda y el Partido Popular no ahorraron duros calificativos contra la actuación del Gobierno durante el temporal, en una sesión de control parlamentario cargada de tensión. Pero a Pujol le disgustaron sobremanera las duras críticas que le lanzó el Partido Popular, su fiel aliado parlamentario, y acusó a la oposición de tener una actitud 'insensata' e 'indigna' por criticar al Gobierno en medio de la crisis.

Tres sindicatos de los Mossos d'Esquadra (policía autonómica) denunciaron ayer las situaciones de falta de medios, descoordinación, e improvisación con las que, en su opinión, actuaron los responsables del Departamento de Interior de la Generalitat el pasado fin de semana.

La concreción de ese panorama fue que algunos agentes salieron a patrullar sin cadenas o con cadenas deficientes, sin el equipaje necesario y que tuvieron que soportar órdenes contradictorias para regular el tráfico.