Un bebé de doce meses, hospitalizado por presuntos malos tratos

Ricardo A. C., de 24 años, fue detenido el pasado sábado por agentes del Cuerpo Nacional de Policía como presunto autor de un delito de lesiones y malos tratos a una niña de tan sólo 12 meses. El hombre convivía con María C. C., de 21 años, madre del bebé supuestamente maltratado, en una vivienda del número 12 de la calle de Cabestreros, en el distrito Centro.

Los hechos fueron descubiertos cuando uno de los vecinos del inmueble avisó a la Policía Municipal. Se quejaba del alto volumen de la música que procedía de la vivienda en la que residía Ricardo A. C. Nada más entrar en la casa, los agentes oyeron, además de la música alta, el llanto desgarrador de un bebé. En la casa sólo estaban, en esos momentos, el bebé y Ricardo A. C. La madre de la criatura se encontraba trabajando en un locutorio telefónico en el número 6 de la misma calle.

Los agentes, al observar al bebé, descubrieron que presentaba lesiones producidas por arañazos y mordiscos, además de diversos hematomas por todo el cuerpo, según fuentes policiales. Hasta el lugar se desplazó entonces una UVI móvil del Samur, que trasladó a la niña y a su madre al hospital del Niño Jesús. La madre había salido momentos antes del trabajo alertada por la presencia de una ambulancia frente al portal donde vivía con su compañero.

A mediodía de ayer, la pequeña permanecía ingresada, en observación, en el centro sanitario. Fuentes policiales informaron de que el hombre pasará, próximamente, a disposición judicial como presunto autor de un 'delito de lesiones y de malos tratos en el ámbito familiar'.

La policía sospecha que el detenido aumentaba el volumen de la música cada vez que maltrataba al bebé 'para evitar que su llanto fuera escuchado por los vecinos'. Todos los vecinos consultados por este periódico dijeron ayer estar sorprendidos por lo sucedido, aunque varios reconocieron que la música alta en la vivienda 'era el pan nuestro de cada día'.

Por otra parte, agentes del Cuerpo Nacional de Policía intervinieron ayer en una discusión familiar en la calle de Bernardino Antequera, 2 (en el distrito de Usera) y avisaron al Samur ante la 'evidencia de lesiones producidas por presuntos malos tratos' a una niña de cuatro años. La pequeña no requirió traslado a ningún centro hospitalario, según explicó un portavoz de este servicio de emergencias. La policía no detuvo a nadie.