Zaplana apuesta por encauzar la voz de las regiones en Europa

Eduardo Zaplana convocó ayer a los altos cargos de la Administración autonómica a sus órdenes para negar discurso a la oposición, celebrar el apoyo a la gestión del Consell que reflejan los sondeos de opinión y subrayar el apoyo electoral que mantiene el PP después de seis años de gobierno. El presidente de la Generalitat instó a 'consolidar' el liderazgo que atribuyó a la Comunidad Valenciana en el conjunto del Estado y apostó por 'encauzar la voz de las comunidades autónomas en Europa'.

La alocución que el presidente dirigió a sus altos cargos no fue precisamente una arenga. Tuvo más bien el tono de una cansina letanía que desgranó el rosario habitual de éxitos y subrayó la ausencia de un discurso coherente desde la oposición. Pero entre medallas, el presidente se deslizó en algún terreno pantanoso.

Puertas adentro, Zaplana celebró que un 64% de los ciudadanos perciban la acción de un gobierno eficaz y participen de la supuesta posición de liderazgo que disfruta la Comunidad Valenciana. Como hito, el presidente destacó su papel en la definición del modelo de financiación autonómica que entrará en vigor en enero. Como reto, apostó por ocupar una posición de privilegio en el 'debate abierto' sobre las fórmulas para 'encauzar la voz de las regiones en Europa'. Un rol que asumirá cuando sea nombrado -'no sé si primero presidente y luego vicepresidente primero'- del Comité de Regiones de la Unión Europea, pero cuyo hilo conductor evitó desvelar.

Puertas hacia fuera, Zaplana cargó contra los socialistas por alentar el 'debate abierto' sobre el papel de las regiones en la UE. 'Hablar por hablar', dijo. 'Un día los socialistas dicen que defienden el federalismo asimétrico, que nadie sabe lo que es, y otro día dicen que las comunidades autónomas tienen que tener voz en los órganos de decisión de la UE, pero no dicen cómo lo pueden instrumentalizar', sentenció.

La consigna que trasladó a su equipo fue huir como de la peste de los señuelos que tiende la oposición socialista, 'y algunos medios de comunicación', cuando niegan la bondad de la situación presente. Y como oráculo, vaticinó una dura oposición centrada en la descalificación de su persona. Pero concluyó: 'No debemos preocuparnos, nosotros, en lugar de tomar bocadillos de atún, trabajamos todos los días'.