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El 'asesino de Pozuelo' irá esposado cuando salga de su celda para evitar que mate otra vez

El moldavo Arcan ha amenazado con nuevos crímenes si es extraditado a Rumania

La cárcel de Soto del Real ha aplicado el más duro de sus regímenes al moldavo Pietro Arcan, preso por la muerte del abogado Arturo Castillo, asesinado en su chalé de Pozuelo de Alarcón. Allí donde vaya, incluso en la prisión, Arcan deberá ir esposado. Según fuentes penitenciarias, el director de Soto, Feliciano Crelgo, ha optado por aplicarle las medidas de seguridad más extremas tras la terrible advertencia que lanzó el moldavo el miércoles antes los jueces de la Audiencia Nacional: 'Si me extraditan [a Rumania], voy a matar a otra persona y así seguir aquí'.

El moldavo Arcan no quiere que el Gobierno español le extradite a Rumania, cuyas autoridades le reclaman por un crimen de similar crueldad al de Pozuelo de Alarcón, ocurrido el pasado 20 de agosto. Arcan estaba buscado por las autoridades rumanas como supuesto autor, junto con Olah Gavril, del asesinato a golpes de Gheorghe Marius, cuando éste se hallaba en su vivienda de la ciudad de Satu Mare el día de Navidad de 2000.

El director de la penitenciaría de Soto ha tomado nota de la amenaza de Arcan ante los jueces y le ha aplicado el estricto régimen que permite el artículo 65 del Reglamento Penitenciario, según fuentes sindicales. Ahora mismo, Arcán está solo en una celda de aislamiento y sólo se le permite salir varias horas diarias a un pequeño patio del módulo de aislamiento.

Antes de proferir su amenaza ante la Audiencia Nacional, también estaba solo en una celda, incomunicado, pero podía compartir sus horas de patio con uno o dos compañeros del módulo de aislamiento. Ya no. Eso sí, puede leer libros o periódicos en la celda.

El régimen que se le ha impuesto es el más estricto de los que ampara la actual ley penitenciaria. El temor a que, para eludir una eventual y futura extradición, cumpla su amaneza y mate a cualquiera que se le cruce en el camino ha llevado a los responables del penal a limitar sus salidas dentro y fuera de la cárcel (las comidas se las llevan a la celda). Los presos que no están aislados desayunan, almuerzan y cenan en comedores colectivos. Y además pueden desplazarse con libertad por el patio y demás instalaciones, e incluso comparten celdas. Arcan no. Allí donde vaya -siempre que ello suponga un contacto directo con otros presos, funcionarios o jueces- lo hará esposado y bajo estrecha vigilancia, según la directriz impartida por la dirección de Soto del Real.

El moldavo lanzó la amenaza de volver a matar tras oír decir al fiscal Fernando Burgos, a través de un intérprete de ruso, que Arcán cumplía todos los requisitos para ser extraditado a Rumania una vez que fuese juzgado en España. Pero Arcán no quiere ni oír hablar de las cárceles rumanas.

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Desde que ingresó en Soto, su vida penitenciaria, aunque menos dura que ahora, ha transcurrido en celdas de aislamiento. Los atroces delitos que se le atribuyen a Arcan condujeron a los responsables de Soto a aislarlo de inmediato. 'Es inteligente y frío, como la mayoría de los psicópatas', destacan fuentes penitenciarias.

Clases de castellano

En Soto, tiene un maestro particular que le enseña a hablar y escribir en castellano. Su vocabulario de español es parco (apenas 120 palabras). Siempre con rictus serio, no había dado ningún problema hasta que soltó la amenaza.

Este moldavo fue detenido la madrugada del pasado 20 de agosto, acusado de degollar al abogado Arturo Castillo, de 47 años, en el chalé que éste poseía en Pozuelo de Alarcón. Supuestamente había entrado en la vivienda para robar, pero, tras disparar al letrado, hirió de dos disparos en el abdomen a la esposa de Castillo, acuchilló en el cuello a una hija del matrimonio, de 17 años, y agredió sexualmente a otra de 15 años. Obtuvo un botín de 19.000 pesetas que las jóvenes guardaban en sus huchas. Fue uno de los nueve robos en chalé que le atribuye la policía, algunos cometidos en Coslada, donde tenía fijada su residencia.

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