Baljic, Bolic y Bolo desafían a un Zidane en estado de gracia

No es un grupo de teatro de variedades. Bolic, Baljic y Bolo son la tripleta de futbolistas conque el Rayo intentará emboscar al Madrid en el pequeño estadio Teresa Rivero de Vallecas (17.00 horas, Teletaquilla). Al técnico, Gregorio Manzano, le basta con Helder y Quevedo para sostener el centro del campo rayista en el reducido rectángulo verde. Por detrás colocará una línea de cuatro defensas y por delante otros cuatro atacantes. No habrá recato esta tarde para esperar al Real Madrid, que llega en plan intimidatorio, con Zidane proclamando la fe en sí mismo para dirigir las operaciones.

Zinedine Zidane se mueve como si flotase por los entrenamientos y los partidos. Elusivo como siempre, irradia una paz interior que se contagia. Desde hace dos semanas el francés asegura en público estar 'satisfecho' con su rendimiento -en privado, susurra que lo que ven los aficionados no es más que la punta del iceberg-. Ha terminado el periodo de adaptación y exhibe un juego espectacular. 'Por fin he encontrado mis sensaciones, y es verdad que con el dúo de pivotes, con Makelele y Helguera, hemos visto otro equipo de pronto', dijo ayer al periódico francés L'Équipe.

Junto con Zidane, el Madrid ha encontrado el equilibrio y la solución a muchos de sus problemas recurrentes. Le faltaba una bisagra que uniera líneas y recuperó a Helguera; no tenía suficiente gol y el viejo Morientes dio por terminado un año de infortunios. En la defensa, Pavón ha hecho una irrupción sorprendente. Hombro con hombro con Hierro, el canterano hace gala de cualidades largamente buscadas por los técnicos del club en un marcador central: intuición para anticiparse a la jugada, madurez, y serenidad para cortar y sacar el balón jugado. Sin ampulosidades, sencillo y frío. La prueba más sangrante del éxito de Pavón es que Karanka ni siquiera fue convocado a Vallecas.

Para explicar la ausencia de Karanka el entrenador madridista, Vicente del Bosque, quizá dejó entrever que prefiere llevar a Bravo porque las cuestiones técnicas prevalecen sobre el criterio de antigüedad: 'Es una cuestión técnica y de estrategia nuestra. Hago la convocatoria pensando en que, en caso de que haya alguna lesión, hay jugadores más polivalentes que otros, sin olvidarnos del pasado de cada uno'.

Después de una victoria ajustada ante el Sevilla (2-1) y un triunfo fragoroso frente al Sparta (2-3), el Madrid tiene ante sí el reto de sostener su recuperación en la competición de Liga, un campeonato que no ha comenzado nada bien. 'Ganar en Vallecas y mantener una regularidad', es el objetivo a corto plazo, según Del Bosque. 'El equipo ha jugado bien a lo largo de la temporada, pero ahora tenemos una cota de estabilidad de que no habíamos gozado. Sin lesiones, ni jugadores en las distintas selecciones, estamos consiguiendo ese punto de continuidad que siempre es interesante para un equipo', opinó el técnico.

Sobre mantener el mismo once que el Madrid luce desde hace una semana, Del Bosque fue escéptico: 'Teniendo en cuenta todos los partidos que vamos a disputar, no es fácil mantener siempre un mismo once. Un equipo se sostiene desde un esqueleto importante y nosotros lo tenemos',

El Rayo es el último clasificado, pero Del Bosque hace advertencias: 'En los tres últimos partidos que han jugado en casa han ganado con autoridad. La clasificación no cuenta, y para nosotros siempre ha sido un rival de consideración'.

Ayer Manzano, el entrenador rayista, cantó la alineación que jugará contra el Madrid y en ella estaba Baljic. El media punta bosnio, que ha sido madridista hasta hace un mes, será titular por primera vez desde que fue cedido al Rayo. En su alineación influye la creencia de Manzano de que tiene una buena dosis de resentimiento hacia el Madrid. Fichado por Toshack en 1999, Baljic no tuvo oportunidades de jugar con Del Bosque y se presumen sus intenciones de demostrar su valor.

'Pensando en que este Madrid ha encajado 10 goles fuera de casa, creemos que puede ser vulnerable en alguna ocasión', aclaró Manzano, que a falta de Pablo Sanz -lesionado- ha formado un equipo netamente agresivo. Sobre Zidane, Manzano se manifestó compasivo: 'La vacuna anti Zidane no existe, pero mis jugadores no van a cocerle a patadas'.

Rayo Vallecano: Lopetegui; Corino, Hernández, Mainz, Graff; Quevedo, Helder, Michel, Baljic; Bolo y Bolic.

Real Madrid: Casillas; Salgado, Hierro, Pavón, Roberto Carlos; Figo, Makelele, Helguera, Zidane; Raúl y Morientes.