'Si en dos meses no logro potenciar la Ley de Extranjería, dejo el cargo'

Mikel Azurmendi ha sido designado por el Ministerio del Interior próximo presidente del Foro de la Inmigración. Las opiniones de este antropólogo, profesor de la Universidad del País Vasco y miembro fundador de la plataforma ¡Basta Ya! son contundentes.

Pregunta. ¿Le gusta la Ley de Extranjería?

Respuesta. Tal vez me habría encontrado más a gusto con la anterior, pero me acomodo perfectamente a ésta. Creo que el barullo que se ha levantado en torno a ella y ese intento de armar un cirio anticonstitucional son excesivos. En cuanto al Programa Global de Regulación y Coordinación de la Extranjería y la Inmigración en España (Greco), me parece magnífico. Se pueden hacer muchas críticas a las leyes desde un despacho universitario, pero sólo en la dinámica de la acción es posible ver si pueden transformarse y adaptarse. Debemos apoyarlas, ponerlas en marcha, ver en qué fallan e ir perfilándolas sobre el terreno.

'Las ONG han hecho bastante poco. Deben colocarse al servicio de los ayuntamientos'

P. ¿Es partidario de un pacto de Estado sobre inmigración?

R. Absolutamente. En Europa hay dos patas para caminar: la integración de los inmigrantes, pero sin menoscabo de la seguridad para los ciudadanos.

P. ¿Estaría dispuesto a hacer de hombre puente entre el Gobierno y la oposición para lograrlo?

R. Creer que una persona puede arreglar algo contra la opinión de la ciudadanía es un error. Sólo la práctica puede abrir la puerta a un pacto. Por ejemplo, los alcaldes del Poniente almeriense del PSOE y del PP están básicamente de acuerdo al abordar la inmigración. Son sus partidos los que no lo están. ¡Qué más quisiera yo que mi práctica sirviera para acercar posiciones! Mire usted: si en dos meses no logro potenciar la Ley de Extranjería, dejo el puesto. Yo no soy un hombre de partido.

P. El Foro ha sido rediseñado y varias ONG importantes se han quedado fuera. ¿Contará con ellas?

R. Sé que ha existido algún problema en el Foro, pero no sé en qué ha consistido exactamente. Quiero que todas las opiniones estén presentes en él.

P. Algunas ONG están pensando en constituir un foro alternativo.

R. Si hacen eso, vamos dados. Me parece una equivocación radical. El Foro debe ser un tanque de ideas donde se repiense continuamente la situación. En realidad, creo que deberíamos remodelarlo y dar cabida a las corporaciones municipales y a todo tipo de ciudadanos.

P. Pero los ayuntamientos ya tienen representación.

R. Hoy sólo los ayuntamientos están trabajando en la integración social de los inmigrantes: casa por casa, con programas específicos. Y con presupuestos muy escasos. Las ONG han hecho bastante poco. Acoger a la gente no es sólo arreglarles los papeles y dejarla en chabolas. Las ONG deben colocarse al servicio de los ayuntamientos. Queremos hacer ciudadanos de los inmigrantes, y eso se ventila en la acción municipal, donde los cargos están controlados por los ciudadanos, que son los que pagan.

P. ¿Qué opina de los problemas para abrir un Consulado de Marruecos en Almería?

R. Los disturbios de 2000 en El Ejido fueron algaradas callejeras. Una pataleta. Lo del Consulado de Marruecos puede ser lo mismo. La gente tiene miedo por su seguridad. Eso no es racismo, es miedo. Arzalluz es racista, los de HB son racistas sui géneris. El miedo al otro no es racismo. El racismo nace de ese miedo.