Desconcierto

La acumulación de beneficios en los mercados de valores con un ambiente económico negativo ha provocado algunos movimientos vendedores que, en algunos momentos, llegaron a preocupar a los habituales del parqué. Los índices llegaron a caer más del 2% arrastrados por la Bolsa de Francfort, en la que, al parecer, una operación errónea con futuros precipitó los acontecimientos.

La subida de los mercados en los dos últimos meses apenas ha conseguido que la tranquilidad sea una simple consecuencia antes que la variable de fondo, de manera que los inversores siguen con los nervios a flor de piel y al primer síntoma de cambio de orientación en el mercado se bajan en marcha, tal y como sucedió ayer en las primeras horas del día.

Las últimas previsiones de la OCDE sobre la evolución de la economía llegaron en un mal momento, tanto por referirse a la inmediata entrada en recesión del conjunto de los países que integran esta organización como por situar el inicio de la recuperación para el segundo semestre del año próximo.

El descenso de la producción industrial de la eurozona en septiembre contrastó con el inesperado avance de los índices de tendencia (leading indicators) de octubre en Estados Unidos que, guiados por la recuperación de la Bolsa, ofrecían un tono engañoso.

La contratación en el Mercado Continuo fue de 1.762,22 millones de euros, 293.210 millones de pesetas, una cifra que indica que todavía hay muchos inversores que confían en la posibilidad de que los mercados mantengan la orientación alcista.