Conocer para opinar

'Quería participar en este viaje porque me apetecía conocer directamente lo que es la inmigración ya que creo que, algunas veces, los medios de comunicación no dicen toda la verdad'. Virginia Navarro Siles es alumna del Instituto Jacaranda, de Churriana (Málaga), y una de los 26 estudiantes que han participado en un novedoso viaje de estudios.

El reto de la inmigración y sus posibilidades educativas es el nombre del proyecto con el que ese centro educativo ganó el segundo premio del concurso de viajes de estudios convocado por el área de Juventud del Ayuntamiento de Málaga.

El premio les ha permitido llevar a cabo su proyecto, que consistía en viajar hasta El Ejido (Almería) y Cartagena (Murcia), para intentar acercarse al modo de vida y trabajo de los inmigrantes. En su visita a la provincia almeriense los estudiantes malagueños se encontraron con una contradicción difícil de entender. Querían intercambiar opiniones con los inmigrantes, pero no tuvieron esa oportunidad.

El recelo ante la situación que se vive en la zona fue el argumento esgrimido por la persona con la que contactaron para justificar que los chavales no pudieran hablar con inmigrantes. Los estudiantes visitaron un invernadero de flores y otro de hortalizas y pudieron conocer el funcionamiento de esas explotaciones de agricultura intensiva. La imposibilidad de entrevistarse directamente con inmigrantes quedó, en cierto modo, suplida por las explicaciones que les ofreció un técnico agrícola que fue el encargado de recibirlos en el segundo invernadero que visitaron.

Los alumnos que han participado en este proyecto, del que son responsables los profesores Antonio Báez y Paco Salado, tienen opiniones muy distintas sobre el tema de la inmigración. Algunos están sensibilizados con el tema, a otros la inmigración les resulta totalmente indeferente. 'Uno de nuestros principales objetivos es que los chavales o chavalas a los que este tema no les importa puedan tener la posibilidad de cambiar su opinión a través del conocimiento', explica el profesor Antonio Báez.

El mar de plástico que caracteriza el paisaje del Poniente almeriense llama la atención de los estudiantes. 'A mí me habían dicho que había muchos invernaderos y muchos plásticos, pero no pensaba que fuera tanto', comenta Cristina Sánchez.

Los alumnos de este instituto antes de realizar el viaje tuvieron que elaborar un trabajo que consistía en recopilar canciones, buscar películas y recortar noticias de prensa relacionadas con la inmigración. Esto último parece haber sido lo más difícil para ellos según se desprende de sus propias manifestaciones: 'Yo no he encontrado muchas informaciones relacionadas con la inmigración', comenta Verónica Moreno.

Los responsables del viaje recogen este sus principales objetivos la necesidad de hacer comprender a sus alumnos que el respeto es posible desde el conocimiento y el respeto. Ese es el contexto en el que se entiende la explicación de quienes han promovido este viaje de estudios, unos docentes convencidos de que 'África va a pasar por el Mediterráneo en su viaje hacia Europa y lo mismo que hoy se habla de afroamericanos, un día se hablará de afroeuropeos, con la diferencia de que está en nuestra mano que en el origen de esta nueva configuración del mundo no exista una esclavitud parecida a la que tuvieron que padecer los primeros africanos que llegaron a América'.