PSPV y EU dicen que los cambios son para 'colocar amigos'

La oposición parlamentaria, socialistas y Esquerra Unida, coincidieron ayer en la valoración de la remodelación del segundo escalón del Consell presentada por Zaplana. El portavoz socialista en las Cortes Valencianas, Ximo Puig, explicó que 'se había optado por llevar a cabo una minicrisis de gobierno sólo en clave interna, atendiendo al entramado de intereses personales del presidente de la Generalitat y su entorno en lugar de pensar en los intereses de los ciudadanos'.

Por su parte, el portavoz de Esquerra Unida y coordinador general, Joan Ribó, acusó a Zaplana de utilizar la remodelación para 'colocar a amigos y resolver los problemas con el blaverismo [en referencia al nombramiento del presidente de Lo Rat Penat]'.

Ximo Puig argumentó que Eduardo Zaplana había optado por 'aplazar la crisis de su gobierno con parches para intentar disimular los escándalos del Instituto Valenciano de la Exportación (Ivex), el caso Morey y Terra Mítica. Puig destacó especialmente los nombramientos de Miguel Navarro, de que dijo que tiene un pasado en el que destaca por 'ser un gestor avalado por el fracaso y duramente cuestionado' en CACSA y Terra Mítica, y de Amparo Flores, 'cuando el único gran proyecto que se le conoce es el de haber participado en el fichaje de Jaime García Morey, ex director general de Gescartera, como asesor de Presidencia de la Generalitat'. El portavoz parlamentario socialista también puso el acento en la destitución de Joaquín Berenguer como director general de Comercio, del que aseguró que 'se trata de otra víctima política del caso Ivex y del complicado entramado que esconde el instituto que ha derrochado más de mil millones en el contrato con Julio Iglesias'.

Joan Ribó llamó también la atención sobre el nombramiento de Miguel Navarro, 'que sabe muy bien cómo dejar en números rojos las empresas', y de Enrique Esteve con el que 'se pretende tranquilizar a las huestes blaveras'.