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Obras Públicas y Ayuntamiento acuerdan dejar en manos privadas la explotación del metro de Sevilla

La sociedad Metro de Sevilla, formada por el Ayuntamiento y la Consejería de Obras Públicas de la Junta, escogió ayer la fórmula de concesión administrativa para encargar a una empresa privada la construcción, y posterior gestión y explotación, de la línea 1 del metro sevillano para la que, según los cálculos de Alejandro Rojas Marcos, 'podrían empezar las obras antes del fin de 2003'. Rojas Marcos, presidente de la sociedad, anunció la opción escogida acompañado por la vicepresidenta y consejera de Obras Públicas, Concepción Gutiérrez, que afirmó que la concesión administrativa garantiza 'la eficacia, la rapidez y la viabilidad' del proyecto de ferrocarril metropolitano.

Del modelo de construcción y explotación de la línea 1 del metro de Sevilla, entre la Universidad Pablo de Olavide y el Parque de los Príncipes, la primera de las cuatro proyectadas, sólo se decidió ayer que será a través de una concesión administrativa a una empresa privada, una fórmula similar a la que funciona en el de Oporto, pero ajena al resto de metros españoles, cuya gestión está en manos directamente de la Administración.

La opción de emplear modos tradicionales para la construcción y explotación de la primera línea supondría, según Gutiérrez, 'retrasos significativos en el inicio de la obra y no se garantizaría la explotación del sistema'. Lo que pretende Metro de Sevilla es 'avanzar en la fórmula de puesta en marcha y ejecución' de la primera línea.

Los pros y los contras de una u otra opción podrán ser discutidos hoy y mañana en unas jornadas que reunirán en la capital andaluza a directivos de las sociedades de metro de Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao, Lisboa y Oporto.

Aparte de la fórmula de concesión administrativa elegida, todos los demás detalles de la explotación de la futura línea de metro quedan a expensas del convenio que deben redactar Junta y Ayuntamiento en el primer trimestre de 2002 para fijar el marco legal al que deberá atenerse la empresa que sea escogida y que dará respuesta a todas las preguntas que ayer empezaron a surgir: qué parte de la construcción financiarán las administraciones y qué parte la concesionaria; cómo afectará la fórmula escogida a las tarifas; qué grado de control tendrá el Ayuntamiento sobre la actividad de la concesionaria; etc.

En la construcción de la línea 1, que tendrá una longitud de casi 10 kilómetros, se utilizarán los 3.800 metros de túneles existentes desde 1984 y que han sido recuperados y examinados en los últimos meses.

Del resto de pasos a dar en la tramitación necesaria para el inicio de las obras, la Sociedad de Metro prevé que el estudio de impacto ambiental estará listo para el primer trimestre de 2002 y el proyecto básico de la red de metro estará terminado en el primer semestre de 2002, con lo que la licitación y adjudicación de las obras podría realizarse en el segundo semestre del próximo año.

Con el proyecto básico terminado, antes de mediados del año que viene, la Junta estará en disposición, según explicó Gutiérrez, de remitirlo al Gobierno central y, sobre esa base, iniciar las negociaciones para establecer la aportación económica del Estado a esta infraestructura de transporte.

Rojas Marcos aseguró que 'no hay vuelta atrás en la construcción del metro' y que 'los pasos que se dan, se dan con todo rigor, acuerdo político y sin ninguna presión'. 'No estamos dispuestos a sacrificar la calidad del proyecto por prisas', concluyó.

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