35 muertos en los últimos diez años

Desde 1991 hasta hoy, 35 alpinistas españoles, tres de ellos mujeres, han perdido la vida en accidentes de montaña, una lista que excluye a los excursionistas afectados por temporales meteorológicos y otras travesías menores.

En accidentes estrictos de escalada, el ocurrido en el monte Pumori ha sido el más grave, con cinco muertos. En agosto de 1997 murierion cuatro alpinistas en la vertiente italiana del Mont Blanc. Ignacio Cote Dueñas, Rafael Castillo Luque, Patricio Guerra Fernández y Federico Merás Miranda procedían de Córdoba y Sevilla en una expedición en la que sólo hubo un superviviente, Iván Muriel Jara, rescatado por un helicóptero.

En febrero de 1998, José Luis García, Jorge Pereira y Martín Delasco, procedentes de Madrid y Catalunya,fallecieron en la cordillera de los Pirineos tras quedar atrapados en una zona de difícil acceso del circo glaciar de Gavarnie, en la vertiente que da a Francia del Paque Nacional de Ordesa (Huesca). Sus cuerpos fueron rescatados al día siguiente.

Desconcierto

Las familias de los cinco montañeros fallecidos en el Pumori se encuentran 'desconcertados y aturdidos', según manifestó ayer Mari Abrego, portavoz de los familias de Aritz Artieda (23 años), vecino de Etxarri Aranaz; de Javier Arkauz (22), de Lakuntza, y de César Nieto (23), de Pamplona.

La confusión añade más dolor a los familiares que todavía no se explican lo ocurrido. El presidente de la Federación Navarra de Montaña, Koldo Goñi, aclaró que, pese a su juventud, todos ellos tenían experiencia suficiente para acometer el proyecto de ascender al Pumori. 'Eran muy buenos deportistas', subrayó Goñi.

Por otra parte, el Ayuntamiento de Azpeitia, de donde era natural Beñat Arrue (22 años), otro de los fallecidos, ofreció, tras tener conocimiento de la trágica noticia, la ayuda de dos personas que podrían desplazarse a Nepal para ayudarles, aunque los cinco restantes miembros de la expedición descartaron esa posibilidad y decidieron emprender el camino de regreso a Katmandú, a donde llegarán el próximo lunes.

Definitivamente, los cuerpos de los cinco montañeros quedarán en el Pumori, su primera y fatídica cita con el Himalaya, a causa de una avalancha, algo que se produjo también dos días antes de que ocurriera el accidente que les costó la vida.

Las malas condiciones metorológicas se producen en toda la zona y dos expediciones al monte Everest se encuentran actualmente detenidas por este motivo.