Las encuestas coinciden en dar mayoría absoluta a los populares

Pocas veces los sondeos demoscópicos habían sido tan unánimes. La prensa gallega y algunos diarios nacionales publicaron ayer varias encuestas, en el último día en que se permitía su difusión, y casi todas coincidieron en vaticinar que el mapa político gallego permanecerá inalterable tras las elecciones autonómicas del próximo día 21.

Los estudios de opinión publicados ayer por La Voz de Galicia y El Mundo se parecen mucho a los ya divulgados en los últimos días por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) y por un equipo de la Universidad de Santiago. Según esos pronósticos, se podría dar el caso de que el próximo domingo el reparto de escaños en el Parlamento autonómico sea idéntico al que salió de las elecciones de 1997, en las que el Partido Popular logró 42 diputados; el Bloque Nacionalista Galego, 18 parlamentarios, y el Partido Socialista de Galicia-PSOE, 15. Los dos diarios citados atribuyen ahora al Partido Popular entre 39 y 42 escaños; entre 18 y 20 al Bloque Nacionalista Galego, y 15 al PSOE.

Las mejores noticias para los socialistas se las proporcionó el sondeo de Ipsos-Eco-Consulting publicado por Faro de Vigo y La Opinión de A Coruña, que atribuyó al Partido Socialista de Galicia entre 17 y 18 escaños, muy cerca del BNG. De todos modos, el Partido Popular mantendría con holgura la mayoría absoluta, y los nacionalistas el segundo puesto.

Convencidos de su triunfo, los populares sólo temen que esa seguridad desmovilice a su electorado. 'Las encuestas son hasta demasiado buenas', había dicho Fraga el día anterior. 'Yo preferiría que fuesen peores', añadió. De ahí el machacón mensaje que repiten los populares desde el inicio de la campaña: hay que buscar el voto 'casa por casa, en los bares, en los comercios, en la familia...'. 'Los gallegos, con mucha razón, quieren que se les pida el voto', explicó Fraga el sábado en Vilalba, donde el presidente del PP de Lugo, José Luis Iravedra, instó a todos los seguidores del PP a que se conviertan en 'agentes electorales'.