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Entrevista:JUAN LUIS GOENAGA | PINTOR

'A la síntesis se puede llegar a través del barroquismo o de lo minimal'

Hasta el 23 de este mes puede verse en la Galería Epelde & Mardaras la exposición de pintura de Juan Luis Goenaga (San Sebastián, 1950). Del 3 al 13 de octubre Goenaga ha participado en Francia en unos encuentros de vivencias creativas entre artistas franceses, búlgaros, españoles y finlandeses, denominados Artistas de Europa, organizados por Papeles de las Landas. La obra de Goenaga está presente en todos los museos vascos. Se dedica profesionalmente a la pintura desde 1967.

Pregunta. ¿Esta exposición sobre temas figurativos lo ha hecho como un alto en sus trabajos de informalismo matérico?

Respuesta. Pienso que es la misma cosa. La última exposición en Madrid también fue figurativa. En ella se tocaba el tema del paisaje y del desnudo.

P. ¿Cómo ha surgido el tema erótico? ¿Por redescubrimiento del sexo o tomado como un tema como otro cualquiera?

R. De una forma totalmente natural. Estaba plasmando interiores de casas, de mi propia casa, y surgió la figura, creo que intencionadamente, pero a la vez también tuvo que ver con lo que aconteció en una conversación que sostuve con Emilia, de la galería Epelde & Mardaras, en cuanto a por qué no hacer una exposición entera sobre tema erótico.

P. ¿Podíamos hablar en su caso de expresionismo que sigue pautas de orden impresionista?

R. No me interesan tanto los términos impresionismo, expresionismo... Me interesa tanto Fragonard como Tiziano, Goya o Picasso.

P. En los cuadros grandes se percibe una relación muy cercana a la pintura abstracta por la que es usted más conocido. Es decir, el tema erótico queda más perdido, menos definido. ¿La dimensión es tan rotundamente condicionante?

R. Suele variar completamente la realización de un cuadro grande de uno pequeño. Los que más se me complican son los medianos. Me interesaban los de pequeño formato, porque podía jugar con más libertad a la hora de elegir y cambiar los temas. En los grandes, la gestualidad es más intensa.

P. ¿Al incluir tacones altos en las modelos quiere significarlos como como condición suprema de eroticidad? O mejor: ¿no hay eroticidad sin tacones altos?

R. Queda claro que el erotismo no ha estado en el desnudo, sino en los ropajes y en lo que se intuye. Esto lo saben bien los pintores de todas las épocas y condiciones. Y el diseño del tacón tampoco es algo reciente si no que aparece ya en grabados antiguos. También los franceses tienen una gran tradición en el tacón de la mujer.

P. ¿Pretende demostrar que en un cuadro figurativo existe un sinnúmero de trazos de orden abstracto e intención, asimismo, abstracta?

R. En muchos cuadros se me hace difícil saber dónde están los límites entre la figuración y la abstracción. A veces los cuadros empiezan de forma abstracta y terminan siendo figurativos y al revés.

P. ¿Podíamos decir que, dado que su vida es un vivir dentro de la naturaleza, sus cuadros no son sino maleza disfrazada de pintura?

R. Está bien la comparación.

P. ¿En el aspecto técnico ha experimentado con la utilización de los fondos, dejando huecos blancos que sirvan al modo de líneas no trazadas, pero que están vivas en los lienzos?

R. Dejar los fondos blancos aviva mucho los colores y el cuadro respira mejor.

P. ¿Existe la voluntad de expresar mucho con muy pocos trazos?

R. Lo que suelo pretender es llegar a una síntesis en las series. A la síntesis se puede llegar lo mismo a través del más puro barroquismo como de lo que entendemos por mínimal.

P. ¿La experiencia figurativa puede ser útil a la hora de volver al abstraccionismo matérico?

R. Nunca pierdo de vista la figura. Siempre está detrás. A veces está más presente y otras no tanto.

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