El romanticismo con referencias españolas domina la moda de Milán

El romanticismo, con claras referencias españolas, y los años hippies, con sus inspiraciones étnicas, se perfilan como las claves de las pasarelas milanesas de la mano de las más de 100 firmas que durante 11 días (del 23 de septiembre hasta mañana) proponen sus creaciones para la próxima temporada primavera-verano.

Aunque algunas casas han decidido cancelar sus presentaciones, otros, como Calvin Klein, cuyo desfile tuvo que suspenderse en Nueva York debido a los atentados terroristas, han acudido a mostrar a la prensa y a los compradores internacionales su colección sobre maniquíes estáticas. La firma E-Play, que se había inspirado en el fuego como eje de sus estampados, decidió eliminarlos de la pasarela.

Dolce & Gabbana optó por boleros en punto gris anudados en el pecho sobre vestido sexy con escote profundo en negro con bordado blanco, corsés con tachuelas y pantalones a la cadera con bajo con vuelo años setenta, además de túnicas cortas con estampados de flores rosas, anchos cinturones de trenzados de colorines y una serie de patchwork en ante, piel y charol de colores variados.

Tom Ford para Gucci volvió a sorprender con una colección original a base de prendas oversize -o gigantes- como el super trench o gabardina en ante beis, los superpantalones al estilo turco o paquistaní con cinturones dando varias vueltas a las caderas, chaquetas cortas evasès y chaquetas tipo cadete muy ceñidas con cuello Mao.

Moschino Cheap & Chic tampoco ha sido ajeno a lo español mezclando faldas de volantes canguro en punto de algodón con capucha con chaqueta torera encima, o blusas con escotes asimétricos adornados con puntillas, además de túnicas de gasas con estampados de flores verdes.

Versus, segunda línea de Versace, propone una moda hiperjoven a base de minivestidos en tonos pastel con volantes y bordados de strass, faldas cortas vaqueras y tops con tirante al cuello en estampados de colores suaves.