32.000 millones gastados
La aplicación de la Ley de Víctimas del Terrorismo (1999), entra en su fase final, en su vertiente indemnizatoria, con la resolución de los 'casos complicados', que la Administración eleva a 124. A fecha de hoy, ha pagado 24.367 millones -23 millones por cada uno de las 1.056 personas asesinadas- a los familiares de víctimas del terrorismo, en sus vertientes más variadas. Numerosas organizaciones terroristas están disueltas (Comandos Autónomos Anticapitalistas, FRAP, MIL), pero las familias de las víctimas de su actividad se han beneficiado de la ley que se aplicó retroactivamente a los actos terroristas cometidos desde el 1 de enero de 1968, año en que ETA inició sus atentados mortales. La ley también contempla la indemnización a las víctimas por lesiones graves y leves. Los grandes inválidos han cobrado 2.665 millones -41 casos, a 65 millones de indemnización por afectado-; los incapacitados absolutos, 2.172 millones -142 casos, a 16 millones de indemnización por persona-; los incapacitados totales, 2.688 millones -336 casos, a 8 millones por individuo -, y los incapacitados parciales, 480 millones -80 casos, a 6 millones por persona-.
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