Nueve personas muertas y 80 heridas en un choque de trenes en Alemania

Un choque frontal de dos trenes locales en Enzisweiler, en las cercanías del lago de Constanza, en el sur de Alemania, dejó ayer más de ochenta heridos, nueve de ellos graves, entre ellos uno de los conductores, según informaron las autoridades alemanas.

Sólo la poca velocidad de ambos convoyes, cada uno de los cuales constaba de dos vagones, evitó una tragedia mayor. Ninguno de los trenes descarriló completamente. En cada uno de ellos viajaban aproximadamente 150 personas, la mayoría de ellas niños y adolescentes entre 10 y 15 años, que se dirigían a sus colegios.

Según las primeras investigaciones, el accidente ocurrió debido a que uno de los conductores ignoró una señal de parada. La vía ferroviaria correspondiente sólo cuenta con una vía, y de hecho varios pasajeros tuvieron tiempo de observar que el convoy que salía de la estación de Enzisweiler, una pequeña población en Baviera, no había esperado para dejar pasar al otro tren. El conductor del tren infractor, de 51 años, deberá hacer frente ahora a una investigación penal, según informó la fiscalía de Kempten.

Ambos trenes chocaron a 500 metros de distancia de la estación, poco antes de las siete y media de la mañana. 'Yo vi que el tren se nos venía encima y comencé a correr en dirección contraria', contó un joven de 14 años. 'Hubo un gran estruendo y junto a varios niños fui expulsada del asiento', relató una señora.

La mayor parte de los viajeros pudo abandonar los vagones por sus propios medios. Varios heridos graves tuvieron que ser trasladados en helicóptero a hospitales cercanos. Más de 300 socorristas acudieron al lugar, algunos de ellos procedentes de los países limítrofes, Austria y Suiza. Las autoridades anunciaron que ofrecerán ayuda psicológica para quien así lo solicite.

Reducción de accidentes

A lo largo de los años noventa, el número de accidentes ferroviarios ha disminuido en Alemania. La población, sin embargo, aún recuerda muy bien lo sucedido el 3 de junio de 1998 en Enschede (Baja Sajonia), cuando 110 personas murieron después de que un tren rápido ICE (equivalente al AVE español) se estrellara contra el puente de una autopista. Otro accidente ocurrió el 6 de febrero del año pasado, cuando un tren descarriló en las cercanías de Colonia. Nueve personas murieron y 150 resultaron heridas.