Detenidos cuatro hombres por un secuestro con torturas
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía en Cádiz y Ceuta mantienen abierta una investigación para determinar las circunstancias del secuestro y tortura sufrido por cinco vecinos ceutíes por parte de una banda afincada en las proximidades de Chiclana (Cádiz). Cuatro de los presuntos culpables han sido detenidos y la policía busca a un quinto, al que se identifica como el cabecilla del grupo. La policía baraja, entre otras, la hipótesis de un alijo de droga perdido como móvil.
Los hechos ocurrieron a finales de agosto. Un grupo de cinco jóvenes residentes en Ceuta fueron invitados por unos conocidos a pasar la tarde del día 26 en un chalé en las inmediaciones de la localidad gaditana de Chiclana. Según explicaron a la policía, los ceutíes esperaban presenciar por televisión un encuentro de fútbol.
Una vez en la vivienda, los invitados fueron agredidos con cuchillos y amenazados con pistolas por sus anfitriones para, a continuación, ser conducidos por la fuerza a una segunda vivienda. Una vez allí, cuatro de ellos fueron puestos en libertad y recibieron la indicación de volver a Ceuta para reunir un rescate de cinco millones de pesetas. A la entrega sería liberado el quinto joven ceutí, K. P. M, que quedó como rehén. Cuatro de los atacantes ocultaron su identidad con capuchas, mientras que el quinto, al que se le atribuye origen marroquí, actuó, según la investigación, a cara descubierta.
Descargas eléctricas
Durante los tres días que duró el secuestro, los delincuentes sometieron a su víctima a torturas con descargas eléctricas mediante electrodos y a golpes con palos, según la versión de sus compañeros a la policía. Finalmente, los amigos del retenido lograron, con la ayuda de la familia del secuestrado, reunir el dinero solicitado. A finales del pasado mes de agosto el rescate fue entregado y el rehén liberado.
A continuación, de regreso a Ceuta, las víctimas pusieron los hechos en conocimiento del Cuerpo Nacional de Policía de aquella ciudad, que en colaboración con agentes de la comisaria de Cádiz, abrió una investigación que aún está en proceso.
Como resultado de las pesquisas, la policía habría identificado el chalé de las afueras de Chiclana donde habría sido retenido el joven ceutí. A partir de ese momento, una operación de vigilancia ha dado como resultado la detención de cuatro vecinos de Chiclana a los que se les imputa su participación en los hechos.
Con todo, la policía dirige ahora su investigación a la identificación y localización del quinto integrante de la banda de agresores, el súbdito marroquí que actuó a cara descubierta, y que ayer no había sido detenido. Si bien se mantiene el mutismo oficial sobre el caso, la policía lo relaciona con un ajuste de cuentas por la pérdida de un alijo de droga. El modus operandi de los secuestradores es similar al empleado por bandas de narcotraficantes en ocasiones anteriores.
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