Una ciudad con menos humos

Bilbao fue ayer una ciudad con menos humos, con menos ruidos. Y con más ciclistas. Pero si alguien se imaginaba que en la segunda edición del Día sin mi Coche la ciudad tendría el aspecto que suele tener cualquier madrugada a principios de agosto, se equivocó. Efectivamente, en las 17 calles cerradas al tráfico privado no había automóviles ni motos, ni siquiera aparcados, pero sí autobuses y máquinas de las que pasan la escoba por las aceras. El sol y el calor, que hizo hasta media tarde -a las 17.00 cayó una impresionante tormenta- acompañó a los paseantes y a quienes se animaron a tomar prestada una bicicleta, tras depositar el DNI. Durante varias horas fue posible hacer el trayecto entre la plaza de Moyua y Deusto sin el acoso de los coches. No obstante, la mayoría de los ciclistas llevaba el casco pertinente.

Sí que hubo menos coches en el centro de la villa, pero la verdad es que no fueron tantos los que por un día cambiaron el coche por el autobús o el metro. El primer balance de la jornada, presentado a mediodía, señalaba que a las once la entrada de automóviles en la ciudad se había reducido en un 20%. Las salidas habían descendido un 19%. Pero la cifra de usuarios del transporte público sólo había aumentado a esa hora un 5% sobre la de cualquier otro día. De todos modos, las narices y los oídos de la ciudadanía quizá notaron la ausencia de coches y motos. El ruido ambiental fue de cinco decibelios menos que cualquier día laborable, lo que supone 'una clara mejoría' respecto a un año antes. Las emisiones de nitratos descendieron un 13% y las de dióxido de carbono cayeron en un 44% (frente al 32% del año pasado). La celebración de esta jornada pretende concienciar a la sociedad para que no abuse del automóvil. Los ecologistas insistieron, una vez más, en que las grandes proclamas de esta jornada se conviertan en una política cotidiana.

Bilbao eligió introducir el pronombre posesivo en el lema (Día sin mi Coche), en un intento de apelar a la responsabilidad individual. También adelantó un día la jornada para que fuera laborable. El resto de los municipios vascos celebrará el Día sin Coche mañana.

Al filo de las once de la mañana, las emisoras de los taxis de Bilbao eran un hervidero: que si al número tal le acababan de dejar entrar en la zona vetada al tráfico privado, que si a otro se lo acaban de prohibir... 'Que les den la orden, que para eso tienen emisoras como nosotros', bramaba un conductor.

La Policía Municipal malinterpretó una de las instrucciones que dio el Ayuntamiento y durante buena parte de la mañana prohibió a los taxis sin pasajeros entrar en la zona acotada. Es más, varios taxis que esperaban clientes junto al hotel Carlton, en la plaza Moyúa, fueron multados, uno de ellos incluso dos veces. El entuerto se resolvió hacia mediodía cuando autoridades municipales les comunicaron el malentendido y les pidieron disculpas.Sólo el transporte público, los vehículos de emergencias y los de minusválidos pudieron circular por la zona restringida.

San Sebastián, Vitoria, Getxo, Barakaldo y medio centenar de municipios más tienen previsto celebrar hoy con diversos actos, en algunos casos incluso cerrarán áreas urbanas al tráfico, el Día sin Coche. La zona de la ría de Urdaibai acogerá una marcha ciclista que saldrá desde Gernika. También se desarrollarán en otros lugares.