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Los trabajos en la M-50 seguirán tras el desmantelamiento del poblado chabolista de Los Yelmos

El poblado chabolista de Los Yelmos, que llegó a albergar a más de 1.000 ciudadanos magrebíes, ha desaparecido del paisaje de Boadilla del Monte. El Ayuntamiento de la localidad procedió el miércoles al derribo de las últimas cuatro chabolas. En el que fue el mayor asentamiento chabolista de inmigrantes sólo quedaba un padre y sus dos hijos, que trabajan de jardineros. El derribo del poblado permitirá proseguir con la construcción de la carretera M-50 en ese punto.

Para acabar con el poblado, el Ayuntamiento, gobernado por una coalición de PP y Eficacia Independiente, puso en marcha un plan de realojo de los afectados. Fuentes municipales aseguran que todas las familias viven ahora en pisos y se ha escolarizado a los niños. En 2000, los pobladores del asentamiento recibieron una notificación donde se les comunicaba que tenían que abandonar las infraviviendas para ser realojados en pisos de protección municipal. En un primer momento, el Ayuntamiento ayudó a las familias en todos los trámites. Ante el avance de la M-50, este verano se comunicó a los últimos habitantes de Los Yelmos el inminente desalojo.

El alcalde, Arturo González Panero, del PP, resaltó que, además de un éxito social, el realojo facilita a la Administración la construcción de la M-50. En este contexto, González quiere acabar con otro de los problemas que pesa sobre esta vía: un recurso contencioso administrativo interpuesto por todas las fuerzas municipales en 1999, y con el que se pretendía variar el trazado de la M-50 o que la vía discurriese enterrada a su paso por el municipio.

El equipo de gobierno ya no piensa lo mismo: el alcalde considera ahora que el recurso impide una relación fluida entre el Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento de Boadilla del Monte. 'La carretera está en marcha y el trazado es inamovible', subraya González. 'Lo único que podemos hacer es que se implanten mejoras, como son tres falsos túneles de 100 metros cada uno y pantallas vegetales y acústicas', añade. Para ello es necesario no seguir adelante con el recurso. Sin embargo, en el pleno extraordinario celebrado ayer el desestimiento se quedó sobre la mesa.

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