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Entrevista:ROSARIO | CANTANTE Y ACTRIZ

'Lo mío es la música en vivo, no tengo vocación de actriz'

Todavía sigue mirando al cielo cada vez que tiene un problema para pedir a su madre que la eche una manita. Rosario Flores (Madrid, 1963) no se explica sin esa ayuda la buena racha que parece haberle llegado. La cantante rueda estos días en Madrid los últimos planos de Hable con ella, la nueva película de Pedro Almodóvar, con la que la que vuelve al cine tras varios años de ausencia y, a finales de septiembre, presenta Muchas flores (Ariola), su nuevo disco en el que retoma sus raíces más rumberas y las canciones melódicas que la lanzaron a la fama.

Pedro Almodóvar siempre la había apoyado e incluso en alguna ocasión le había hablado de un papel que estaba escribiendo para ella, pero Rosario se llevó la alegría de su vida cuando le ofreció protagonizar Hable con ella. '¿Qué más puedo pedir? Si además de trabajar con un pedazo director me visto de luces para interpretar a una mujer que sufre de amores...'.

'La edad me ha llevado a sentirme mejor conmigo misma y a no perder el tiempo inútilmente'

Ponerse en el lugar de Lydia no ha sido fácil. Durante dos meses ha recibido clases de toreo de salón con Juan Antonio Macareno -'Doy unos pases de pecho estupendos'- y al director de cine le ha pedido que tenga paciencia con ella. 'Interpretar es muy difícil y yo nunca he tenido vocación de actriz, lo mío es la música en vivo. Sólo soy una artista, una rockera siempre dispuesta a subirse a un escenario. Sin embargo, trabajar con Pedro tiene la ventaja que él te hace todos los papeles. Si se queda contento después de rodar una escena yo me quedo tranquila. Tengo que confesar que no sé muy bien lo que estoy haciendo. Me voy a llevar una sorpresa cuando me vea en la pantalla'.

Rosario empezó su carrera en el cine a los doce años con Al fin solos, de Antonio Giménez Rico, pero fue en Colegas, la película de Eloy de la Iglesia, donde demostró su talla como actriz dramática.La música se cruzó después en su camino y abandonó esa faceta del espectáculo. Antes de que Almodóvar la llamara, había recibido ofertas para otros papeles cinematográficos, pero en todos los casos su respuesta fue negativa. Tendrá que pensarselo mucho si después del estreno de Hable con ella vuelven a llamarla para otra película.

Nada más concluir el rodaje, Rosario empezará con la promoción de su nuevo disco, Muchas flores, 11 cortes con los que vuelve a sus raíces, tras la incursión más rockera que supuso su trabajo anterior, Jugar a la locura. Con el nuevo compacto, Rosario estrena también casa discográfica. 'Me muero de ganas de subirme a un escenario. Voy a hacer una pequeña gira de invierno para presentar el disco y luego un tour gordo para la primavera'.

'Me ha costado mucho acabar este nuevo álbum. Los que me conocen saben que doy mucha guerra hasta poner el punto final a las canciones. A veces soy un poco caótica, la inspiración me viene en cualquier sitio y tengo que ponerme a apuntar cosas. He llegado incluso a llamarme por teléfono a casa y dejar grabada una melodía o una letra en el contestador para que no se me olvidara'.

Muchas flores tiene canciones de Andrés Calamaro, Jorge Drexler y Alberto Moraga, y un tema, Al son del tambor, dedicado a su padre, Antonio González, en la que incluso se escucha su voz. En parte esa canción ha salido de lo que ella llama 'el archivo familiar' y que no es otra cosa que apuntes o notas que le dejaron su padre o su hermano. 'Quiero que todos sepan quién era El Pescaílla y que se le reconozca como uno de los creadores de la rumba catalana', dice.

A sus 37 años, Rosario se siente una artista adulta. 'Los discos son el motor de lo que estás viviendo, y Muchas flores es el resultado de un momento optimista y feliz'. La hija pequeña de Lola Flores sigue luciendo su melena salvaje y todavía puede permitirse enseñar el ombligo por encima del pantalón vaquero. Tiene una hija de cinco años, Lola, que llena su vida y la prensa del corazón parece haberse olvidado de ella. Ni ellos la persiguen ni ella vende exclusivas. En El Lerele, la antigua residencia familiar, viven ahora ella y su hermana Lolita con sus dos hijos. Están juntas, pero separadas, aunque comparten zonas comunes como el jardín y la piscina. 'Ese era el sueño de mi madre'.

En su área, decorada con muebles de época, destacan un enorme cuadro de su hermano Antonio, retratado con el pecho al descubierto, y una colección de fotos de Lola Flores bailando, donde se aprecia el enorme parecido de Rosario con ella. 'Ahora he aprendido lo que valen las cosas pequeñas y que te compren un disco. A mí la edad me he llevado a sentirme mejor conmigo misma y a no perder el tiempo con cosas que no te interesan'.

Las heridas causadas por la pérdida de su madre, la inésperada muerte de su hermano Antonio y el fallecimiento de su padre no han cicatrizado del todo, pero ya duelen un poco menos. 'Me volví loca. Estaba en un momento muy sensible, me arañaban y me volvía una leona' cuenta con naturalidad.

Tanto ella como su hermana Lolita, que en estos momentos rueda con Miguel Albaladejo, parecen haber roto con la maldición de las flores. Ya no son las hijas de...

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