_
_
_
_
OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Discriminado por razón de mili

En marzo de 1989 me vi obligado a incorporarme al servicio militar. Tres meses más tarde, y tras pasar múltiples peripecias para poder seguir estudiando y asistir a las diferentes pruebas, aprobé las oposiciones como profesor de secundaria. Al empezar el siguiente curso, mientras el resto de compañeros y compañeras que habían aprobado se incorporaba a sus destinos, yo seguía cumpliendo con mis deberes patrióticos.

Las consecuencias de todo esto las seguiré sufriendo el resto de mi vida profesional: no sólo dejé ganar el dinero correspondiente a aquel curso y a la antigüedad que todos los que no hicieron el servicio militar cobran regularmente unos años antes que yo, sino que -lo que es más grave para mí- todos ellos han tenido siempre más oportunidades que yo en los concursos de traslados.

Así, me ha tocado ver cómo el mismo Estado que me obligó a cumplir con él durante 12 meses me negaba las plazas que iba solicitando para dárselas a estos compañeros / compañeras que habían superado las oposiciones al mismo tiempo que yo. Nos encontramos ante una situación generada y avivada por la Administración tanto española como, en mi caso, catalana, que se puede calificar claramente como una discriminación por razón de mili.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_