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Maragall aconseja a Pujol que ceda la presidencia a Mas

El líder de la oposición socialista, Pasqual Maragall, aconsejó ayer a Jordi Pujol que ceda la presidencia de la Generalitat al conseller en cap, Artur Mas, para poner fin a la 'confusa' situación actual, en la que según él no se sabe muy bien quién dirige realmente el Gobierno catalán. Maragall insistió ayer, en una entrevista radiofónica, en que el propio Pujol explicó hace una semana que ya no dirige ni coordina el Gobierno de la Generalitat y que estas funciones las ejerce Mas.

Ante esta situación, Maragall sostuvo que sería más lógico que fuera Mas quien hablara en nombre del Gobierno en el próximo debate parlamentario de política general, previsto para principios de octubre. El debate debería ser,argumentó, con quien efectivamente lleva la dirección del Gobierno. Pero lo que sucederá será, en cambio, que 'Pujol hablará en nombre de Mas'.

El dirigente socialista explicó que la situación en la que se halla Pujol después de 21 años de estancia al frente del Gobierno catalán es muy parecida a la que vivió en 1997 el propio Maragall en el Ayuntamiento de Barcelona, cuando llevaba 14 años como alcalde. En aquel momento, recordó Maragall, había culminado ya sus proyectos como alcalde y fue por esta razón que cedió su plaza a Joan Clos. Consideró que ambas situaciones son absolutamente comparables, y dijo: 'El señor Pujol tendría que hacer lo mismo que hice yo'.

La unidad de España

Maragall rechazó las acusaciones lanzadas el miércoles en Quintanilla de Onésimo por el presidente del Gobierno, José María Aznar, contra el federalismo de los socialistas y las alianzas del PSOE con la izquierda nacionalista gallega y balear. Maragall acusó a Aznar de utilizar con 'frivolidad' el concepto federal, del que destacó que es una idea que une en vez de separar, como erróneamente entiende Aznar. En cambio, agregó, el PP agita la idea de una España dividida 'y esta concepción de España es la que hace daño'. El presidente del PSC dijo que tiene interés en explicar personalmente a Aznar sus concepciones federales.

Respecto a las alianzas con los nacionalistas, Maragall destacó que precisamente el PP y los nacionalistas catalanes de CiU han ido más lejos que nadie en sus pactos. Hasta el extremo, dijo, que ambos partidos 'se han casado definitivamente' y CiU ha comprometido incluso su apoyo futuro para cuando el PP pierda la mayoría absoluta en las Cortes en la próxima legislatura.

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Maragall dijo que es 'mentira' que el comando Barcelona de ETA precisara tener órdenes especiales de su dirección para atentar contra miembros del PSC. Lo mejor que se puede hacer con las intenciones supuestas o reales de ETA es hablar lo menos posible de ellas, sostuvo Maragall, porque de otra forma lo que se consigue es hacer propaganda a una organización que lo que persigue es matar.

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