Un incendio arrasa 250 hectáreas de matorral y pastos en Navalafuente

Un incendio arrasó ayer unas 250 hectáreas de monte bajo, matorral y pastos en los términos municipales de Navalafuente, Bustarviejo y Valdemanco, según informó un portavoz de Emergencias 112. Las llamas se propagaron por tres frentes distintos a causa del fuerte viento que soplaba en la zona. En su extinción participaron 19 dotaciones de bomberos y cinco helicópteros de la Comunidad de Madrid, dos hidroaviones del Ministerio de Medio Ambiente y varios retenes de Medio Natural.

El fuego se inició, por causas que todavía no han sido esclarecidas, en el kilómetro 4,5 de la carretera M-631 (Bustarviejo-Cabanillas de la Sierra), alrededor de las 14.20 horas. Los empleados de una gasolinera cercana fueron desalojados, como medida de prevención, ante la posibilidad de que las llamas alcanzaran el recinto. El servicio de la línea de tren Madrid-Burgos, que transcurre por la zona, también tuvo que ser suspendido. Sólo afectó a un tren procedente de Irún con destino a la capital, que fue desviado por Ávila.

El fuerte viento que soplaba en la zona dificultó las labores de extinción y provocó que las llamas se extendieran en tres focos. El primero se extendió hacia Valdemanco por el norte. Otro avanzó hacia el noreste, hacia Bustarviejo. El último foco avanzó hacia Cabanillas de la Sierra, por la ladera este. 'El fuego iba tan rápido que los helicópteros tuvieron que recoger agua de las piscinas de los chalés de la zona', comentaba ayer Sara Perales, una residente en Valdemanco.

Los bomberos se centraron en que el fuego no alcanzara los pinares de Miraflores de la Sierra y el valle de Bustarviejo. Por eso reforzaron a media tarde las dotaciones que intervenían en el incendio, que pasaron de ocho a 19 apoyadas desde el aire con cinco helicópteros. Alrededor de las ocho y media de la noche se habían controlado los focos de Bustarviejo y de Cabanillas, según informó un portavoz de Emergencias 112. Al cierre de esta edición quedaba activo todavía el de Valdemanco.

Cálculos provisionales Las primeras estimaciones de los bomberos cifran en 250 las hectáreas calcinadas en el siniestro de ayer. Los técnicos de Medio Natural tienen previsto evaluar hoy la zona desde un helicóptero, lo que les permitirá dar una cifra más aproximada de lo arrasado por las llamas.

El de ayer no es el primer incendio que afecta a Navalafuente. El pasado 21 de julio se quemaron 60 hectáreas de pastos y bosque de robles y encinas en esa zona y el fuego afectó también a los términos municipales de Guadalix de la Sierra y Bustarviejo. Otras 64 hectáreas de masa forestal de la sierra de Guadarrama fueron devoradas por el fuego el 31 de julio. Tras este siniestro, Renfe decidió cambiar la ruta del Talgo Madrid-Hendaya, ya que, según los vecinos de la zona, el tren iba soltando chispas y provocaba los fuegos. En lugar de pasar por Somosierra se desvió por la línea de Ávila.