Que no vuelvan de vacaciones, sobran todos

En Madrid sobran todos los que se marchan de veraneo.

Si, madrileño o turista, estás en agosto en Madrid, guárdanos el secreto. No digas a nadie lo bien que se está aquí cuando se han marchado tres millones de madrileños. Porque es indiscutible verdad, vivimos mejor sin ellos, sobran.

En verano hay agua en los grifos, luz para los semáforos, las calles están limpias, diría yo más limpias. Los restaurantes son buenos, los cines, los teatros... Todo funciona.

Más: funcionan mejor y con el placer de aparcar delante de cualquier sitio. Y, si por desgracia tienes que ir al hospital, también hay plazas y sin listas de espera.

En definitiva, Madrid es perfecto en verano. Por consecuencia, esto demuestra que los que se han ido de vacaciones sobran. Tenemos que decirles muy claramente que no hacen ninguna falta. Que no vuelvan.

Dicho eso, el verano en Madrid apacible y sin estrés me recuerda otro periodo de paz y de sosiego. Recordar que hace unos años, casi siete, Felipe González acababa de perder honrosamente las elecciones. Los populares, sin mayoría absoluta, intentaban pactar un Gobierno con los catalanes. Jorge Pujol, habiendo dejado de ser un 'enano', se hacía de rogar.

Entonces hubo un momento como mágico. Algunos periódicos habían dejado de publicar escándalos, 'ya no hacían falta los socialistas, ya habían perdido'.

En los ministerios nadie gobernaba. Los socialistas se iban; los populares no habían llegado. Era genial. Pasamos unas semanas mágicas de calma y sosiego. La sociedad española vivía perfectamente, sin Gobierno, ni jefe ni nadie. Y todo funcionaba bien. Perdonad, mejor.

Porque no vaya a creer que el 'Gobierno', que son escasamente 15 personas, es el que hace funcionar el país.

No, no por mucho que se autopongan la medalla. Si el país funciona es porque los españoles trabajamos.

Bueno, mejor dicho, quitando los madrileños veraneantes. Porque para volver a lo nuestro, en Madrid somos cuatro millones. Pero está claro que sobran tres. Entonces estamos de acuerdo en que no vuelvan, ¿vale?

Y a ver si el año próximo el jefe me da el mes de agosto, porque estoy harto de hacer funcionar este país aquí yo solito.