El 'British' espera a su 'Niña'

Club de golf de Sunningdale, Berkshire, Inglaterra. El otro Open Británico, el femenino, abre hoy sus puertas por primera vez a la coleta rubia de Paula Martí, una barcelonesa de 21 años de estampa sinuosa, casi siempre recortada en el fondo verde de su deporte. Una silueta que dibuja un swing perfecto, estético y ganador y que algunos consideran la versión femenina de Sergio García, El Niño. Martí ya ha sido bautizada por el Reino Unido: La Niña.

Una niña (Barcelona, 1980), pero con experiencia en el arte de invertir el orden jerárquico: Martí sólo ha necesitado seis meses como profesional para ganar dos prestigiosos torneos, el Open de Italia y el Masters Británico, e infiltrarse entre las cinco primeras de la Orden del Mérito Europeo. Su modelo dentro del golf español, la zaragozana Raquel Carriedo, segunda este año en Europa, tardó seis años en conseguir su primer triunfo: Taiwan, en 2001. Carriedo también estará en ésta edición, la 26ª, del Open.

A Paula, hija del pintor Joan Martí, además de por su juventud, se la compara con García por su juego: descaro y genialidad al servicio de la sorpresa. Los dos se conocen desde los 12 años, cuando asistieron juntos a la escuela de la Federación Catalana. El otro nombre propio que surge como comparación con la joven golfista es el de la tenista rusa Anna Kournikova: rebelde y guapa. Tanto que un cronista británico sugería la semana pasada en un extenso artículo dedicado a la española que se dedicara a cuidar su imagen más que a cuidar la calidad de su juego. Sin embargo, Martí, cuando habla de nombres, sólo muestra devoción por uno: 'Severiano Ballesteros, el mejor.'

Martí se marchó de España a Estados Unidos, a la escuela del mítico Gary Player, cuando tenía 17 años. 'Aquí nadie comprendió mi golf', explica sin resentimiento. Después ingresó con una beca en la Universidad de Florida. Pero finalmente decidió dejarlo. Así, pues, regresó a Europa. 'No entiendo a los estadounidenses. Con 17 años puedes tener una pistola, pero no te puedes beber ni una cerveza'. Es posible que ahora, después de su espectacular ascenso en Europa, se replantee volver al circuito estadounidense.Un circuito que encabeza con firmeza la sueca Annika Sorenstam, una de las rivales de Martí y Carriedo más cualificadas para llevarse los 45 millones de pesetas (2,7 millones de euros) que percibirá la ganadora del Open. Un torneo que ya ha inscrito en su nómina de ganadoras un nombre español, el de Marta Figueras-Dotti en 1982.

Sorenstam llega al Reino Unido con el aura de revolucionaria del golf femenino: le pega casi tan fuerte, tan lejos y tan recto como un hombre. La sueca desembarca en el Abierto despues de ganar junto a Tiger Woods la semana pasada un duelo mixto contra el ganador del Británico masculino, el norteamericano David Duval, y la también estadounidense Debbie Kerr. Ganaron Woods y Sorenstam.

El escenario, el British, que se disputa desde 1976, se ha hecho de pronto mayor. Este año es, por primera vez, uno de los cuatro grandes del golf femenino. Un honor que comparte con el torneo de la LPGA norteamericana (Asociación de Golfistas Profesionales), el Campeonato Nabisco y el Open de Estados Unidos.

El súbito crecimiento de la prueba británica en los últimos años casa a la perfección con la ambición de Martí. El campo, típico británico -grandes bunkers, hierba alta sin cuidar, calles estrechas y greenes en desnivel- parece el mejor lugar para que La Niña demuestre su 'talento artístico'. Por algo es hija de un pintor.