Nadie trabaja en la N-II tras la primera piedra, según el alcalde de Cervera

El alcalde de Cervera (Segarra), el convergente Salvador Bordes, denunció ayer que el Ministerio de Fomento todavía no ha iniciado las obras de construcción del polémico tramo de autovía entre Cervera y Santa Maria del Camí. La queja del alcalde no es nueva, pero esta vez adquiere mayor importancia porque la carretera, que acumula un retraso de casi 10 años, debería haber comenzado a primeros de año, pero ha sufrido diversos aplazamientos y hace unos días, el ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos puso la primera piedra.

Bordes viajó ayer a Barcelona para pedir explicaciones por esta nueva demora a los responsables de las carreteras del Estado en Cataluña. El pasado día 23, Cascos anunció que los trabajos comenzarían inmediatamente. No ha sido así, ya que en los últimos ocho días no se ha visto ninguna máquina trabajando ni se ha observado ninguna actividad en las inmediaciones de la rotonda donde convergen la variante de Cervera y el Eix Transversal.

En el acto de colocación de la primera piedra, los responsables de Fomento aseguraron al alcalde de Cervera que las obras comenzarían precisamente en la rotonda y que en una primera fase las empresas adjudicatarias darían prioridad al tramo más conflictivo: los dos kilómetros de la C-311 que sirven de enlace con la actual N-II.El alcalde de Cervera ha expresado su malestar por este nuevo incumplimiento de la Administración en un proyecto que lleva muchos años arrastrándose por los despachos. Bordes teme que, pese a lo anunciado, las obras no comiencen hasta después del verano. En este tramo inacabado de la autovía, convertido en uno de los puntos negros de la red viaria catalana, han muerto en los últimos 10 años más de un centenar de automovilistas, una cifra que los familiares de las víctimas y las autoridades de la zona cargan en la conciencia de Fomento, responsable de los sucesivos aplazamientos en el inicio de las obras y contra quien los familiares han presentado una denuncia por negligencia.

Bordes denunció anteriormente que la comarca de la Segarra ha sufrido perjuicios económicos por culpa del retraso en la construcción de la autovía, ya que muchas empresas han renunciado a instalarse en sus polígonos industriales debido a las malas comunicaciones con Barcelona y Tarragona.