Maragall asume que Pujol no anticipará las elecciones

El presidente del Partit dels Socialistes (PSC), Pasqual Maragall, admitió ayer que no habrá elecciones anticipadas en Cataluña a pesar de la reiterada petición de los partidos de izquierda. 'Parece que Pujol no está por la labor', aseguró tras la reunión de la ejecutiva del PSC el jefe de la oposición socialista, quien la semana pasada auguró la convocatoria de comicios en el otoño como consecuencia del 'fracaso' del nuevo modelo de financiación autonómica y del 'clamor' popular exigiendo un adelanto electoral.

'Los que piden elecciones anticipadas probablemente se llevarán una decepción', afirmó Maragall. La petición de un adelanto electoral partió inicialmente de Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V), fue secundada después por el propio Maragall y el PSC, y Esquerra Republicana (ERC) apuntó que un mal acuerdo de financiación autonómica precipitaría los comicios. Los independentistas consideran que el pacto suscrito ayer es pésimo, con lo que la petición de avance electoral por parte de Esquerra es ahora explícito.

Una vez asumido que las elecciones no son inminentes, Maragall explicó que aprovechará los meses de agosto y septiembre para 'reflexionar' y 'velar las armas' para la 'gran batalla política y pacífica', que en su opinión se desatará el próximo octubre. Para este mes están previstos dos grandes debates políticos en Cataluña que marcarán decisivamente la legislatura: el de política general y la moción de censura contra el Gobierno de Jordi Pujol promovida por Maragall, que todavía no está presentada formalmente.

El líder socialista anunció ayer que utilizará un tono 'muy crítico' en el debate de política general para describir la gestión del Gobierno catalán. A su juicio, el actual Ejecutivo, organizado en torno al binomio formado por Jordi Pujol y Artur Mas, es probablemente el peor en 21 años de gobiernos de Jordi Pujol.

'Naufragio'

Este equipo, dijo Maragall, es el responsable de que 'hayan naufragado' todos los asuntos que al principio de la legislatura CiU se comprometió a abordar buscando el consenso: entre otros ejemplos, citó la reforma de la ley de los medios audiovisuales públicos, la reforma de la ordenación territorial, la mejora del autogobierno, de la financiación y de la educación.

En la moción de censura, en cambio, Maragall tiene la intención de actuar en positivo para mostrar a los ciudadanos que está preparado para gobernar y que tiene a punto la alternativa al actual Gobierno de centroderecha. 'Tenemos la obligación y la responsabilidad de presentar la moción de censura', aseguró el presidente del PSC, quien restó importancia al hecho de que ERC apoye o no su iniciativa. Los republicanos han asegurado reiteradamente que no la respaldarán y probablemente optarán por la abstención.